"El aparato digestivo es la ventana del sistema nervioso", fue lo que explicó Federico Peláez Moreno, gastroenterólogo, al referirse a la influencia de las emociones en la salud gástrica.
Y es que un mal manejo de ellas puede conducir a enfermedades como gastritis, estreñimiento o síndrome de intestino irritable, -también conocido como colon irritable-, males tan frecuentes en la actualidad.
A estas condiciones se suman hábitos de vida poco saludables y por supuesto, antecedentes familiares.
"Para proteger el sistema gastrointestinal es importante tener un entrenamiento sobre el manejo de las emociones, tener la capacidad de serenarse y manejar el estrés. El ejercicio conviene mucho al sistema digestivo, la recomendación es hacerlo por lo menos tres veces a la semana, mínimo media hora. Debe ser un ejercicio que produzca alegría, que se haga con tranquilidad y se disfrute", señala Felipe Franco Baena, gastroenterólogo.
Que no
Tener horarios establecidos de comida e identificar alimentos provechosos y nocivos para el sistema es la mejor opción para conservarlo en óptimas condiciones.
En el caso del estómago, la sal es una sustancia que en cantidades excesivas puede ocasionar gastritis, úlcera y hasta cáncer.
Algo similar ocurre con los aderezos picantes. Quienes sufren de gastritis y reflujo deben evitar su abuso. "La prevalencia de reflujo en todos los países de América es del 20%, excepto México que sube al 35%", señaló Franco.
A esta lista se suman los antiinflamatorios, que de no tener protección gástrica pueden ocasionar gastritis y úlceras. En ese sentido es importante advertir al médico durante la consulta si se tienen antecedentes de hemorragias digestivas o úlceras gástricas. Los expertos indican que los estómagos de personas mayores de 60 años son más delicados y se deben proteger más.
La leche, que hasta hace un tiempo estaba incluida en los esquemas de tratamiento para gastritis y úlcera, según estudios se ha identificado que solo aporta una mejoría transitoria, pues la concentración de calcio aumenta la producción de ácidos y a la vez la posibilidad de tener gastritis y reflujo.
El exceso en la ingesta de carne muy cocida es factor de riesgo para la gastritis y el cáncer de estómago. Por esa razón se sugiere comerla a término medio, incrementar el consumo de carnes blancas y las rojas, solo dos veces a la semana.
Las grasas también atentan contra la salud de este sistema por lo que se recomienda optar por las preparaciones asadas o al vapor. Algo similar ocurre con las bebidas carbonatadas negras o colas.
Que sí
La fibra es la mejor aliada de la salud gastrointestinal. Es protectora del colon y el estómago. Además de los cereales, está contenida en las frutas y verduras, razón por la que se hace especial énfasis en incluir en la dieta diaria ensaladas. También son fuente de ácido fólico, sustancia con efecto anticanceroso.
Pollo, pescado, granos y una buena cantidad de líquido (entre 1.5 y dos litros de agua al día), están dentro de las recomendaciones alimenticias. Esta última siempre y cuando no existan otras condiciones de salud que lo impidan.
Comer en cantidades moderadas, masticar bien y despacio, evitar el exceso de alimentos irritantes, ácidos y grasas, reducir el consumo de alcohol y el humo de cigarrillo son otras de las prácticas que favorecen la salud gastrointestinal.
Consumir agua potable y alimentos descontaminados es otra de las generalidades a tener en cuenta, de esa forma es posible prevenir la colonización de la helicobacter pylori, una bacteria que inflama el estómago y puede ocasionar gastritis.
Aumenta con la edad
El riesgo de padecer una alteración gastrointestinal aumenta con la edad.
Coinciden los especialistas en afirmar que a partir de los 45 años las personas deben comenzar a revisarse el colon con cierta frecuencia y desde muy temprana edad adoptar hábitos saludables.
"Toda persona mayor de 30 años que presente reflujo debe someterse a una endoscopia con alguna regularidad. Además, saber que es necesario comer tres veces al día, porque omitir alguna de las comidas puede generar síntomas aunque no necesariamente eso signifique tener una enfermedad", explica Álvaro Rodríguez, gastroenterólogo de la Universidad Nacional de Bogotá.
En la edad adulta es frecuente también tener alteraciones de colon, la razón es la pérdida de una enzima llamada lactasa que ocasiona intolerancia a la lactosa por lo tanto, el intestino delgado no la asimila, la transporta al colon, se fermenta y termina irritándolo.
"Se calcula que cerca del 70% de los adultos en países latinoamericanos pierde la lactasa", menciona Franco.
Consultar al médico ante la presencia de síntomas es la recomendación de los expertos, remedios caseros o automedicarse puede resultar perjudicial.
Al mismo tiempo insisten en la adopción de hábitos saludables, pues hay quienes se ufanan al decir que comen de todo y no sufren ningún mal, lo que poco se sabe es que en el sistema gastrointestinal como en otras estructuras del cuerpo los daños se van acumulando.
Atender a las señales de alarma, escuchar el propio cuerpo y por supuesto, identificar los síntomas de algunas enfermedades gastrointestinales es fundamental a la hora de proteger este sistema.
Para conocer más de cerca sobre ellas, aquí una guía de síntomas y causas de las patologías más frecuentes.
Esté atento y no pase por alto lo que dicen los expertos sobre el tema.
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