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A Compas no le dan las cuentas para construir un puerto en Urabá
La filial del Grupo Argos apuesta en el mediano plazo por consolidar la red portuaria que tiene en 3 países, cuya meta es operar 20 millones de toneladas en el año 2018.
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El puerto de Compas en Barranquilla, en el departamento del Atlántico, se especializa en el manejo de carbón, hidrocarburos, carga general, carga de proyectos y cargas a granel. FOTO cortesía
09 de abril de 2015
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Las propuestas de construcción de infraestructura portuaria en el golfo de Urabá por parte de algunos inversionistas no desvelan a Compas, el operador portuario del Grupo Argos, que prefiere concentrarse en consolidar la actividad logística que actualmente sirve a través de sus terminales en Colombia, Panamá y Estados Unidos.
Pero, ¿por qué esta firma, cuya matriz es uno de los conglomerados más grandes del país y de origen antioqueño, no considera construir un puerto en Urabá? La respuesta la da sin vacilar José Alberto Vélez Cadavid, presidente de Argos: “Para Compas, como organización, las cuentas todavía no nos dan para irnos a hacer una inversión de puertos en Urabá”.
El empresario destaca que actualmente se hable del puerto de Urabá, que existan iniciativas grandes para su ejecución e inversionistas interesados, pero advierte que “tampoco es que el golfo sea capaz con tres o cuatro puertos y si hay alguien que ya picó en punta, ahora para llegar a hacer otro puerto es más difícil”.
Para Vélez, la falta de una vía de acceso que comunique de forma ágil la zona agroindustrial de Urabá con los principales centros de producción es un aspecto clave para no embarcarse en un proyecto portuario.
“Aunque algunos piensan que un desarrollo portuario allá puede iniciarse con la vía actual, lo que creemos es que el puerto sigue estando muy ligado a la construcción de la autopista”, explica el presidente del Grupo Argos.
Mientras Compas no tiene claras las cuentas, otros inversionistas han destapado sus cartas y han anunciado el próximo inicio de obras.
Una de ellas es la de Pio S.A.S, que desde agosto del año pasado trabaja en una propuesta portuaria, en cuatro fases, con capacidad para almacenar 360.000 toneladas de carga y una inversión de 370 millones de dólares.
Además, hace un mes se conoció el proyecto portuario Pisisi, una iniciativa impulsada por un grupo de inversionistas colombianos que asegura que invertirá unos 500 millones de dólares, para poner en operación el complejo en 2019.
“Un puerto en Urabá le puede ayudar a la exportación de banano que hacen los empresarios de ese negocio en la zona y luego podría ampliarse, cuando esté lista la vía. Lo cierto es que en Compas hemos hecho los análisis y todavía no nos dan las cuentas y, por eso insisto: el día que Urabá tenga una carretera con especificaciones que permitan conectar a esa región con Medellín y Bogotá se darían las condiciones para construirlo”, reitera Vélez.
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