En Colombia, un 68 % de la población considera el emprendimiento como una opción de carrera saludable. Esta cifra está por encima del promedio regional (55 %) y global (59 %), de acuerdo con el Estudio de la Actividad Empresarial de Global Entrepreneurship Monitor, que evalúo la opinión de 2.000 personas entre los 18 y 64 años.
Una de las vías para “ser el jefe propio” es el comercio, sector que, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), será el jalonador del país junto a la inversión extranjera para crecer entre 3 % y 4 % hasta 2022.
El caso de los emprendedores que buscan locales complementados con vivienda para iniciar este propósito, representa una buena alternativa de negocio: arrendar una propiedad mixta que incluya local y apartamento.
“Hay una tendencia que viene de hace varios años, se llama centralidades, y se trata de que la gente tenga que transitar muy poco para conseguir sus cosas (...) existe una inclinación por construir vivienda en los pisos de arriba y zonas comerciales en la parte baja de los hogares”, explica Alfonso Álvarez, director de la Asociación de Propietarios, Arrendatarios y Administradores de Propiedad Horizontal (Asurbe)
El directivo agrega que, aunque este es un negocio rentable, se debe tener en cuenta a quién arrendarle. “El elemento clave es la confianza por la persona a la que le va a entregar la propiedad, y si no tiene algún conocimiento puede utilizar intermediarios como las agencias inmobiliarias que pueden estudiar referencias bancarias y comerciales”, señala.
Entre tanto, dice Álvarez, a la hora de realizar el contrato, por lo general deben solicitarse entre uno y dos cánones del valor de arriendo anticipados. Así, por ejemplo, si la cuota acordada es de 1 millón de pesos, en el contrato debe estipularse un pago inicial de entre 1 y 2 millones. Incluso, puede pactar “hasta seis meses de pago anticipados”, añade.