La economía global seguirá mirándose con lupa este año, tras concluir este fin de semana el Foro Económico Mundial en Davos (Suiza), pero que no arrojó soluciones concretas.
Los aspectos que concentrarán la atención de los líderes mundiales en este 2016 pasan por la sincronización de las políticas monetarias del mundo, los históricos precios bajos del petróleo y la tensión originada con la contracción en el crecimiento de la economía China.
Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional; Tidjane Thiam, consejero delegado del banco Credit Suisse, y Haruhiko Kuroda, gobernador del Banco Central de Japón, concluyeron el sábado que estos aspectos son los que concentrarán mayor atención por parte de los que dicten la política económica en cada país.
Por ejemplo, Kuroda pidió concentrar la atención en los países emergentes que están sufriendo las consecuencias de los bajos precios del petróleo.
No obstante, Thiam sostuvo que lo anterior es “bueno para la economía mundial, para el consumo de Estados Unidos, para Europa y para 5.000 millones de personas en países que son importadores netos”, según informó Efe.
El responsable ejecutivo del banco suizo aclaró que el problema de precio es de oferta y no demanda, que en la actualidad está en 1,2 millones de barriles diarios.
A su turno, Lagarde dijo que hay que revisar la falta de sincronización en la política monetaria global, con mayor depreciación de las monedas emergentes y la salida de flujo de capital a economías avanzadas.
