El debate por el aumento de los precios de hierro y acero en Colombia continúa. Mientras Camacol propone solventar esta situación con una reducción a aranceles a bienes como barras y alambrón de acero, la Andi se mostró contraria a la medida y exaltó que Colombia es autosuficiente.
Incluso se pronunció Alacero, asciación que representa a los productores latinoamericanos de esta industria, y expresó preocupación en caso de materializarse esa disminución de aranceles.
Por su parte, Ternium, que tiene una participación en el mercado nacional de varillas de 30%, dijo que si bien la subida de precios es real, esta es una situación global y no solo de Colombia. Y al igual que la Andi, insistió en que el país es autosuficiente. En entrevista con EL COLOMBIANO, Sebastián Castro, presidente de Ternium Colombia, aclara la postura de la compañía
¿Cómo va la producción de Ternium?
“Bien. Logramos avanzar con las acciones de contingencia que debimos implementar de cara a la pandemia y superar las dificultades del Paro Nacional que vivimos durante en abril, mayo y principios de junio. Estamos alcanzando niveles récord de producción de varilla y en lo corrido del año ya superamos las 240.000 toneladas en nuestras plantas de Palmar de Varela y de Manizales”.
¿Cuál es su participación de mercado?
“Contamos con una participación del mercado de varilla cercana al 30%. Seguimos trabajando fuerte en maximizar nuestra capacidad productiva y en fortalecer nuestro nivel de servicio para ofrecer al país una amplia de productos de acero. Hemos innovado con la fabricación del rollo compacto, tenemos la tecnología para ofrecer al mercado un producto donde somos únicos en Colombia, un producto que da a nuestros clientes más velocidad de procesamiento, mejorando la productividad; les permite aumentar la capacidad de almacenamiento bajo mejores estándares de seguridad y les disminuye los niveles de desperdicio (chatarra) generados en el proceso”.
¿Qué tipo de obras están impulsando su operación?
“Tenemos una estructura comercial que da cobertura básicamente a toda la cadena de consumo de aceros largos en el país, y con gratificación hemos visto como los sectores de infraestructura y vivienda han recuperado su nivel de consumo y esperamos que volvamos a alcanzar volúmenes cercanos a los presentados en el año 2015, periodo en el cual se registró el récord de consumo de acero para construcción en Colombia. A agosto de este año, comparado con 2015, el consumo de acero (producción e importación) muestra un crecimiento cercano al 2%”.
¿Cuánto significa Antioquia en sus operaciones?
“Tiene una participación importante, cerca del 30%. Tenemos el beneficio de estar muy cerca de la Planta Siderúrgica de Manizales y además contamos con amplios centros de servicio desde los cuales abastecemos de manera oportuna los diferentes proyectos de construcción, así como clientes industriales que demandan varilla y muchos otros productos de acero de la gama Ternium (tubería, perfiles, lamina en rollo y hojas, tejas, entre otros)”.
En el sector constructor se lanzó una alerta frente a incremento de precios de hierro y acero. ¿Cuál es la posición de Ternium?
“El discurso de Camacol ha cambiado. En principio alertaron una supuesta escasez, que fue sin duda uno de los muchos efectos que trajeron los 50 días de Paro Nacional, pero que bajo ningún motivo se puede considerar como una problemática estructural; tengamos presente que el Comité Siderúrgico de la Andi ha demostrado que la industria siderúrgica local tiene la capacidad suficiente para abastecer el mercado, de hecho, hoy hay inventarios que no se están consumiendo. Ahora Camacol alerta frente al incremento de precios. Esto genera confusión.
Lo que se debe entender es que no se trata de una problemática local, sino que es una situación regional y global. Uno de los hechos más relevantes ha sido la fuerte caída y la posterior subida de la demanda mundial, efecto de la recuperación económica. La subida de precios responde al alza a nivel mundial, en especial durante el primer semestre del presente año, en los costos de las materias primas (chatarra, mineral y carbón), así como a una mayor demanda global de acero”.
¿Hay autosuficiencia en la producción nacional?
“Sí, las siderúrgicas de Colombia tienen una capacidad cercana a 2,6 millones de toneladas de acero para construcción, según las cifras del Comité Siderúrgico de la Andi. Con la nueva planta de Palmar de Varela le dimos al país una capacidad adicional suficiente para reemplazar 500 mil toneladas de varilla importada por producto nacional. Le inyectamos capacidad al sector productivo nacional equivalente al 33% de la demanda de varilla”.