Rappi recientemente puso en marcha la Defensoría al Repartidor (DAR), una iniciativa de autorregulación que buscará proteger los intereses de esas personas que tienen ingresos entregados alimentos y productos a través de la plataforma.
En diálogo con EL COLOMBIANO, María Paula Hernández, líder de la DAR, detalló que esta será una unidad independiente de la compañía para tener capacidad resolutiva y se enfocará, principalmente, en cuatro frentes de acción que se definieron luego de escuchar a unas 19.000 personas que se conectan y hacen entregas.
Resaltó además que es la primera iniciativa de este tipo entre las plataformas de economía colaborativa y el propósito es hacer de Colombia el país piloto y, eventualmente, llevar la Defensoría a los demás países en los que Rappi tienen operaciones.
Las cuatro líneas de trabajo, de acuerdo con la encargada, se enfocan en “asuntos de género enfocados en repartidoras mujeres, promoción del bienestar, apoyo a población migrante y una segunda instancia a donde puedan escalar sus casos cuando no sean resueltos a satisfacción por soporte”.
Los espacios de escucha que originaron la Defensoría se realizaron desde diciembre del año pasado y con esos insumos el equipo de trabajo pasó meses tratando de desarrollar una solución que englobara todos los aspectos que les preocupan a los repartidores.
Así, según narró Hernández, nació la idea final que le llevaron a los responsables ejecutivos en Colombia. Y pese a que se trata de una unidad que básicamente existe para generar inquietudes y propiciar mejoras, los altos mando la recibieron de buena manera y por ello le confirieron autonomía.
Mejorar el respaldo
La defensora al Repartidor indicó que esta iniciativa se estructuró antes de que empezara a discutirse la reforma laboral en Colombia. Y en los encuentros con los repartidores, detectaron que tienen necesidades para acceder a créditos, refrendar licencias de conducción y resolver contratiempos que, en muchas ocasiones, no son solucionadas a través de la plataforma.
Es decir, ellos querían una relación más cercana con Rappi. “Como todo se mueve a través de la plataforma, la relación era muy tecnológica, eso hacía que la relación fuera distante y de corte más transaccional”, subrayó la defensora.
Y añadió: “Con todo lo que nos llega, mostramos qué está pasando con los repartidores (...) para que puedan tomarse decisiones informadas sobre lo que hay que hacer y a dónde debemos movernos”.
La atención de la Defensoría al Repartidor es gratuita y funcionará de manera híbrida. Los repartidores pueden comunicarse con la línea Whatsapp 302 338 1137 o pueden ir a los puntos físicos de atención en las ciudades principales, incluida Medellín.