Este domingo la sonda china Chang’e 5, que transporta muestras de la superficie lunar para traerlas a la Tierra, logró acoplarse este domingo con un módulo en la órbita lunar, informan los medios públicos chinos.
Esta maniobra forma parte de una ambiciosa misión destinada a traer al planeta azul rocas de su satélite, por primera vez en más de 40 años.
Chang’e 5 se compone de varias partes: un orbitador (que permanece en la órbita lunar durante toda la misión), un aterrizador (que se posó sobre la Luna) y un módulo de ascenso (desde el suelo hasta la órbita lunar).
Fue este último el que, cargado con muestras de suelo lunar, se acopló el domingo por la mañana al orbitador, según la agencia de prensa oficial Xinhua, que cita a la agencia espacial nacional (CNSA).
Xinhua especifica que se trata para Pekín “del primer encuentro y el primer acoplamiento realizado en órbita lunar”.
La salida de la cápsula de la Luna el jueves también fue histórica para China, puesto que era la primera vez que Pekín hacía despegar una nave de un cuerpo extraterrestre.
Las muestras, colocadas primero en el módulo de ascenso, fueron trasladadas a una “cápsula de retorno”, que hará el viaje hacia el planeta azul, según Xinhua.