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Loreto quiere que se abra ya el primer “Gran Comienzo”
La obra del jardín infantil Renacer ha tenido seis ampliaciones. Sigue atrasada su inauguración, pero ya su ejecución es del 99%.
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Renacer, en el barrio Loreto, tendrá capacidad para atender a 300 niños y niñas de la primera infancia, y se constituye como la primera gran obra pública del sector. FOTO manuel saldarriaga -
Justificación de una de las ampliaciones de contrato.
02 de agosto de 2022
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Aunque sigue retrasada la entrega del jardín infantil denominado por el alcalde Daniel Quintero como el primer Gran Comienzo, la comunidad de Loreto, en la comuna 9, Buenos Aires, espera que la inauguración sea pronto porque la ejecución de la obra, que se constituye como la primera pública de este barrio, ya llegó a un 99%.
Desde la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), que ejecuta el proyecto Renacer, nombre que se le dio al jardín infantil, confirmaron que el pasado 15 de mayo suscribieron el acta de recibo de la obra, pero con pendientes que debían quedar subsanados el pasado 22 de julio.
EL COLOMBIANO fue al lugar el 25 de julio y constató que aún faltaban detalles menores relacionados con resanes, pintura y acabados mínimos. Fuentes que participaron en la construcción contaron que también estaban pendientes de certificaciones eléctricas y que Buen Comienzo, programa del que forma parte la nueva sede, ya estaba llevando dotación al sitio.
Aunque la EDU no respondió cuál fue la nueva fecha que establecieron para entregar el lugar, sí indicó que están adelantando el proceso de recibo por parte de la Secretaría de Educación, entidad de la que depende Buen Comienzo para la atención de la primera infancia.
Historial de retrasos
El contrato para construir este jardín infantil, de más de 2.770 metros cuadrados, fue firmado el 16 de junio de 2020 con el consorcio Jardín Infantil Medellín, del cual forma parte Luis Óscar Vargas Abondano. Este hombre tiene como precedente que su idoneidad fue cuestionada por la Contraloría en una auditoría a las obras de adecuación de la Clínica de la 80, que también estuvo a su cargo tras ser contratado por la Alcaldía de Medellín.
En el caso de Renacer, el valor inicial del contrato fue de $8.990 millones, incluida la auditoría, según consta en la información del portal Gestión Transparente. Inicialmente, estaba presupuestado entregarla en un plazo de 330 días calendario, contados a partir del 19 de noviembre de 2020, es decir, más o menos en octubre de 2021. No obstante, en septiembre de ese año empezaron a hacerse prórrogas y se firmaron seis en total.
La última de ellas, según informó la EDU, fue el 30 de marzo por 45 días más, lo que explica que el 15 de mayo pasado hayan firmado acta de recibo con pendientes. Además, esta prórroga incluyó una adición de $273 millones para culminar obras asociadas a ventanería y equipos de telecomunicaciones.
Las fuentes que participaron en la obra explicaron que los retrasos se han debido a varios frentes: la pandemia, la escasez de materiales como el hierro y la inclusión de actividades que no estaban contempladas en el contrato inicial, como la adecuación de andenes que no estaba incluida en los diseños.
Otra situación que influyó, contó uno de los participantes en la obra, fue que en 2018, cuando se empezó a preparar el proyecto, el lote donde se levantaría la edificación estaba vacío. Sin embargo, cuando se surtió el proceso de licitación y se adjudicó el contrato, dicho predio había sido convertido en un botadero de escombros por parte de la comunidad, lo que requirió adicionar obras de remoción y separación de alrededor de 1.900 metros cúbicos de material.
Las causas esbozadas coinciden con las expuestas en la justificación de las ampliaciones que se han hecho al contrato, según las cuales las obras “se ha visto afectada por inconvenientes de definiciones de diseños”, relacionados con ajustes a la red hidrosanitaria y eléctrica, ajustes al diseño de la red contra incendio, elementos de soporte de la cubierta, cambios en especificaciones de la carpintería metálica y de acabados, entre otros.
Por lo pronto, aunque la EDU no respondió a la pregunta por la nueva fecha establecida para inaugurar el sitio, se espera que sea lo antes posible, si bien, a estas alturas del año queda en veremos si se puede iniciar la atención de todos los futuros beneficiarios o ya sería en 2023.
La comunidad, que obtuvo por lo menos 40 de los 390 puestos de trabajo que generó la construcción, también ha vivido un proceso de pedagogía, para asimilar la relación con el primer gran espacio público de este barrio, conocido como Pablo Escobar y que ni siquiera cuenta con un parque infantil.
Por eso, también se lanzó la idea de que la nueva sede sea apropiada como punto de encuentro comunitario, si bien, debe tener sus límites para no interferir con la misión del lugar.
El primer “Gran Comienzo”, iniciativa adoptada por la actual Alcaldía dentro de Buen Comienzo, tendrá capacidad para atender a 300 niños y niñas de la primera infancia. La dotación del espacio incluye salas de camacunas, salones, sala de madres gestantes, cocina, comedor y zona de juegos, entre otros.
Por el momento, este será el primer “Gran Comienzo” que se entregará de los cuatro que el alcalde Daniel Quintero prometió tener listos antes de julio de este año. Lo dijo en octubre de 2021, cuando también aseguró que antes de finalizar su administración la mayoría de la atención de Buen Comienzo será bajo el modelo de Gran Comienzo, metodología que promete una infraestructura de altísima calidad, con tecnología de punta y docentes vinculados que no operen como contratistas n
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