Tan solo hace un mes y cinco días que se entregaron las obras de renovación del parque de La Bailarina (junio 5), en el barrio Astorga de El Poblado, y ya los vándalos aparecieron para dejar su marca de rayones sin sentido, hechos en parte del mobiliario de esta zona de la comuna 14.
La denuncia la hizo la corporación Alas de Mariposa, el colectivo cultural que hace diez años convirtió este escenario en el lugar para, a través del arte, rendirle homenaje a la danzarina Isabel Cristina Restrepo Cárdenas, asesinada allí el 14 de junio de 2008 por un sujeto que está en prisión pagando por su crimen.
Tras la queja, EL COLOMBIANO recorrió sus 14.450 m2, y corroboró que hay quienes se han dedicado a rayar sus estructuras: en el pedestal donde está la placa en homenaje a la bailarina instalada en 2009 por el alcalde Alonso Salazar; en la nueva placa puesta por el alcalde Federico Gutiérrez; en las bancas y mesas de concreto, en las vallas señalizadas y en los juegos de parqués que hay sobre las mesas.
Betty Cárdenas, directora de Alas de Mariposa, siente que estos actos no son un ataque al parque como tal ni a su colectivo: “Pensamos que es vandalismo ciudadano, cuando hay un espacio nuevo algunas personas querrán dejar su huella dañándolo”, sostiene.
Betty, artista plástica y madre de la bailarina asesinada, espera que los daños sean reparados y, sobre todo, que no se repitan. Vale recordar que en su intervención se destinaron $3.639 millones.