En una decisión atípica, no solo en Antioquia, sino en el país, la alcaldía de Anorí decidió cancelar las fiestas tradicionales, eventos que son casi sagrados en los pueblos, debido a la crisis de seguridad que atraviesan por cuenta de una escalada de homicidios, enfrentamientos entre grupos armados, amenazas y desplazamientos.
La noticia la confirmó el alcalde Silva, señalando que es una decisión coherente con la situación que atraviesa el municipio del Nordeste antioqueño y también empática con quienes han padecido directamente esta escalada de terror. “Hoy más que nunca, Anorí nos llama a reflexionar. A reconocer el dolor de quienes han sido víctimas del conflicto y de quienes han tenido que abandonar su tierra por causa de la guerra. Hacemos un llamado a la consciencia, a la empatía y al compromiso con la vida y la dignidad. Volveremos a disfrutar de lo que somos, de nuestras raíces y tradiciones”, señalaron desde la administración.
El alcalde reconoció que la decisión traerá impactos económicos, pero también culturales, pero reiteró que corresponde en este momento es velar por las mejores condiciones posibles para evitar riesgos entre la población.
Y es que el conflicto se agudizó en Anorí en los últimos meses. A inicios de junio, dos jóvenes de 15 y 18 años, murieron pisar un artefacto explosivo mientras trabajaban en una zona rural conocida como Alto del Zapatillo, en la vereda Tacamocho. En este sector, además, ya se habían presentado varios de estos accidentes ante el aumento de minas antipersonal y otros elementos de ese tipo enterrados.
En abril de este año, en solo un fin de semana, cinco personas asesinadas en tres hechos en zona urbana, al tiempo que más de 100 personas buscaban refugio en la cabecera municipal por cuenta de enfrentamientos entre grupos armados, como disidencias, ELN y Clan del Golfo.
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Los responsables del derramamiento de sangre en Anorí, según las autoridades, son el frente Jorge Mario Valle del Clan del Golfo y la alianza entre el frente 36 de las disidencias de la Farc y el frente Héroes de Anorí del ELN.
La crisis de seguridad no es solamente en Anorí. De hecho, esta semana se conocieron denuncias de comunidades en varios municipios del Nordeste por la presunta orden de disidencias, ELN y Clan del Golfo para movilizarse por los ríos Porce y Nechí, lo que en la práctica dejaría incomunicadas a miles de personas y golpearía rotundamente la economía de la subregión.
Según la denuncia, los grupos armados en medio de enfrentamientos les habrían prohibido movilizarse por los ríos Porce y Nechí, fundamentales cuencas para la subsistencia de poblaciones en diez municipios del Norte y Nordeste.
El alcalde de Zaragoza, Emilio Luján, corroboró la denuncia y señaló que los grupos criminales restringieron la navegación por estos ríos que conectan a Zaragoza, Anorí y Amalfi, afectando particularmente las veredas Liberia, Charcón, Los Trozos, El Mata y Candelo.
Por todos estos hechos, las tradicionales y esperadas fiestas, que honran la cultura antioqueña con eventos como desfile de mitos y leyendas, tendrá que postergarse hasta el próximo año, a la espera de que por fin el municipio entre en un periodo de tranquilidad.
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