Como todos los mandatarios locales del país, Héctor Monsalve Restrepo habría querido que su segundo periodo como alcalde –el anterior fue entre 2012 y 2015– hubiera comenzado distinto, pero la pandemia truncó sus planes iniciales. De los 21 meses en el cargo, 18 los ha dedicado a atender esta emergencia, lo cual ha concentrado sus esfuerzos y sus inversiones.
Ahora que la situación de salud está controlada (el lunes 30 de agosto, por ejemplo, solo se reportó un contagio nuevo, para un total de 7.882 casos y 147 muertes en toda la pandemia) y la reactivación económica avanza en pleno, Monsalve asegura que “los próximos dos años serán de ejecución total” del Plan de Desarrollo, que incluye temas cruciales para los 82.000 habitantes de este municipio.
La atención durante la pandemia
Héctor Monsalve asegura que “esta situación inesperada” atrasó la ejecución de su Plan de Desarrollo 2020-2023, ya que tuvo que redireccionar recursos para atender temas que no estaban contemplados con el agravante de que al parar el comercio, el recaudo de impuestos bajó y eso es clave para poder desarrollar obras.
“Logramos controlar la emergencia al reinventar la prestación de nuestros servicios. En el hospital Santa Margarita separamos la atención del Covid-19 de las otras patologías, hicimos adecuaciones en la infraestructura y además reorganizamos la atención del personal médico. Afortunadamente tuvimos una buena atención, aunque lamentablemente murieron muchas personas (174), pero salvamos también otras vidas”.
Y en tiempo de pandemia, en el Área Metropolitana la red hospitalaria del Valle de Aburrá fue importante, ya que el hospital no cuenta con unidad de cuidados intensivos en su territorio, pero la estrategia de atención conjunta en la región permitió que sus ciudadanos pudieran ser recibidos en otras entidades.
En cuanto a la difícil situación económica provocada por la coyuntura, el Alcalde afirma que “poco a poco hemos salido adelante y se ha reactivado la economía con responsabilidad de los comerciantes, las industrias y la comunidad. Los próximos dos años serán de ejecución. Hacemos un llamado a los gobiernos nacional y departamental, y al Área Metropolitana para que agilicemos los proyectos que requieren cofinanciación en el municipio y no nos estanquemos”.
Se refiere, por ejemplo, a la adecuación de vías terciarias en la zona rural, a la construcción de un proyecto de turismo en la quebrada Piedras Blancas en convenio con el Área Metropolitana y el mejoramiento del barrio Yarumito por $16.000 millones.
Una de las obras que aún no ha podido iniciar es la remodelación del parque principal, para lo cual ya tiene los diseños y promete no tocar la vegetación, pero sí su estructura física, un proyecto concebido para que sea punto de encuentro de todas las generaciones.
La emergencia de todos modos provocó daños colaterales en temas como la prestación de servicios sociales. Hace apenas un mes se reactivaron las actividades de 54 grupos de adultos mayores que atienden a 3.500 personas inscritas, y así como las programaciones deportivas con cerca de 80 monitores, las cuales estaban aplazadas desde marzo del año pasado.
También se reactivó la programación de la Casa de la Cultura, donde cuentan con 66 programas culturales que albergan a casi 4.000 estudiantes en su jornada complementaria.
“Espero dejar listas algunas, aunque dependen de cofinanciaciones de entidades como el Área Metropolitana y la Gobernación. Además de la remodelación del parque, construiremos una nueva sede de la Casa de la Cultura; la actual solo tiene cuatro salones y en la escuela de Bellas Artes solo podemos recibir a 100 o 200 estudiantes cuando tenemos unos 4.000 que podemos atender. La cultura y los jóvenes se merecen ese nuevo escenario”, dice con respecto al poco avance de algunas de las obras de infraestructura previstas y agrega que además se realizará un mejoramiento de establecimientos escolares rurales, donde se invertirán unos recursos con montos aún por definir en los techos, que por el desuso en la pandemia se deterioraron .
En cuanto a movilidad, espera atender las vías urbanas y rurales en un proyecto con el Área Metropolitana con una inversión de $8.000 millones entre 2021 y 2022.
Apoyo a los más vulnerables
Como parte de sus acciones destinadas a atender a la población más afectada por la pandemia, la Administración Municipal gestionó la entrega de cerca de 10.000 mercados en una labor conjunta con empresas privadas del municipio.
Además, el municipio destinó $1.600 millones para asumir el pago de la energía a los estratos 1 (por el 100 % de sus cuentas), 2 (el 70 %) y 3 (el 50 %) durante junio y julio de 2020, beneficiando a 23.000 de 27.000 hogares que hay en Copacabana.
A los estudiantes del sector oficial se les pagaron las pruebas Saber en su totalidad y para los del sector privado se consiguieron patrocinios de la empresa privada.
