La ilusión de jugar un partido de fútbol y de paso visitar a Medellín, se convirtió en susto para 26 niños y sus acompañantes luego de que el bus de servicios especiales que los transportaba se accidentara en la madrugada de este lunes a la altura del peajito social en Niquía.
El conductor perdió el control del vehículo y este montó a uno de los separadores para finalmente estrellarse contra una de las casetas.
De los 36 pasajeros 26 resultaron con heridas y laceraciones. Dos de ellos, una mujer embarazada y un niño fueron trasladados a un centro asistencial para recibir atención médica preventiva.
Los niños pertenecen al equipo de fútbol del Inder Coveñas y viajaron desde Sucre para competir en la capital antioqueña.
El accidente, ocurrido antes de las 6:00 de la mañana de este lunes, causó caos en la movilidad del norte del Valle de Aburrá.
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