Casi 12 horas después de haber iniciado el fuego que consumió dos pisos del centro empresarial Box en Guayabal, de sus instalaciones seguía saliendo humo gris y el penetrante olor a quemado tan característico en los grandes incendios.
Con el paso de las horas, se iban acercando algunos de los 400 trabajadores de las nueve empresas que allí se ubican y que no se habían enterado del suceso. Estos, al saber la noticia, se mostraban sorprendidos pues les resultaba increíble que el sitio que habían dejado en orden en la jornada anterior estuviera tiznado y con los ventanales rotos. Tuvieron que ser sus propios compañeros quienes –mostrándoles videos– los enteraron de lo acontecido.
De otro lado, en las aceras de la edificación había otros empleados esperando –entre caras de resignación y gestos de tristeza– que las autoridades les permitieran el ingreso al inmueble para rescatar lo poco que se salvó de las llamas.
Una de ellas era la auxiliar administrativa Leidy Gutiérrez, quien desde las 6:00 a.m., ya estaba en la esquina detrás de la cinta amarilla que evitaba el ingreso de los civiles.
“En los 15 años que yo llevo trabajando aquí es primera vez que pasa algo tan grave y por eso tenemos la incertidumbre del futuro. Pero después de esto volveremos con toda, vamos a volver a salir adelante porque esta empresa es sólida”, recalcó.
Llamas de 18 metros
De acuerdo al reporte de las autoridades, a las 10:57 p.m., del jueves la comunidad alertó a los bomberos de un incendio en la calle 7 sur con la carrera 51 que se estaba presentando en una bodega de material de reciclaje adscrita a la empresa Central de Plásticos Medellín.
De acuerdo a lo informado por el Dagrd por momentos las llamas alcanzaron hasta los 18 metros de altura lo que hizo que cerca de las 2:40 a.m., los pisos 3, 4 y 5 del centro empresarial comenzaran a arder también. Por ello fue necesario enviar siete máquinas contra incendios, dos vehículos cisterna y el apoyo de los bomberos de Envigado e Itagüí.
Edisson Ramírez, administrador del centro empresarial, indicó que los cinco pisos de la edificación resultaron afectados ya fuera por la inundación del agua usada por los bomberos o el daño en cielos rasos o vidrieras. Ramírez también indicó que hubo algún tipo de pequeñas explosiones que hicieron que la candela se propagara hacia el inmueble que administra.
“Aunque no hubo heridos, en el cuarto y quinto piso, donde funcionan las empresas Confecciones Lazus J.E. S.A.S y Línea Comunicaciones, hay afectación total. De la sola empresa de confección se quemaron como 40 máquinas y 90.000 prendas de vestir que componían la producción”, agregó.