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A falta de un mes para cumplirse dos años desde que AngloGold Ashanti radicó ante la Anla el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Quebradona, la entidad decidió archivar el trámite de licenciamiento ambiental del proyecto que buscaba extraer 4,91 millones de toneladas de concentrado de cobre, 6,13 millones de onzas de oro, 85,1 millones de onzas de plata y 70,08 kilotones de molibdeno en la mina en jurisdicción de Jericó. La decisión no entierra el proyecto, pues la empresa puede presentar recursos de apelación, pero lo más probable es que tengan que repetir el Estudio de Impacto Ambiental (EIA).
Según explicó la Anla, las principales consideraciones técnicas que llevaron a ordenar el archivo del trámite, se relacionan con: la definición del área de influencia, la caracterización de los componentes hidrogeológico, hidrológico, de geotecnia y biótico, consideraciones frente al depósito de relaves (residuos de la actividad minera) y a la subsidencia, entre otros.
Esto quiere decir que la Anla determinó que la minera sudafricana no resolvió satisfactoriamente los 174 requerimientos que le hizo la entidad en noviembre de 2020 y las cuales AngloGold respondió en enero de 2021.
Por ello, después de surtir todo el proceso (visitas, conceptos técnicos propios y de otras entidades), la Anla concluye que no tiene la información suficiente para pronunciarse de fondo, es decir, para negar definitivamente la licencia o aprobarla.
En consecuencia, la empresa puede volver a presentar un nuevo EIA en el que busque subsanar todos los vacíos.
David Alonso Toro, alcalde de Jericó y quien se ha mostrado a favor del proyecto, precisó que respeta la decisión que emitió la Anla. “Tomamos la medida con tranquilidad y respeto, entendiendo que esa es la autoridad técnica en este proceso”.
Este aclaró que, más allá de ser defensor o no del proyecto, es partidario de una decisión que favorezca los intereses de Jericó y la región. “El desarrollo bien hecho es necesario y ha de ser bienvenido en la región, siempre y cuando cumpla con los temas técnicos en materia ambiental y social”.
Por su parte, el alcalde de Támesis, Juan Martín Vásquez, quien ha sido un férreo opositor a la explotación de Quebradona, expresó que la decisión de la Anla era lo mínimo que se podía esperar pues se trata de un proyecto que ha tenido más de 170 requerimientos, fuera de los más de 500 que le hizo la Secretaría de Minas de Antioquia.
“Lo ideal es que hubiera negado la licencia porque el archivo no implica que no puedan insistir y continuar con estudios, además, contra este acto proceden recursos de reposición”, advirtió.
En el mismo sentido se pronunció el coordinador de la Mesa Ambiental de Jericó, Fernando Jaramillo. Frente a la posibilidad de una reposición, el dirigente social reiteró que la posición del movimiento ambiental de Jericó y de la Mesa Ambiental Nacional es ir hasta las últimas consecuencias. “Sabemos que las multinacionales mineras persisten en las posiciones de tratar de desconocer la voluntad de gente y las leyes para lograr su lucro”, puntualizó.
Carlos Andrés Santiago, integrante del Movimiento Nacional Ambiental, manifestó que la decisión es una victoria para todo el país porque, de momento, frena las intenciones de la empresa de “comenzar con Quebradona el primero de cinco yacimientos que serían explotados en la región y que buscarían tener una gran apuesta megaminera en Colombia”.
Aunque aún le quedan recursos a AngloGold para explotar el yacimiento, esto supone un revés frente al escenario de aprobación de la licencia que muchos en el sector minero ya esperaban, sobre todo después de que el pasado 16 de septiembre la Gobernación aprobara el Programa de Trabajos y Obras (PTO), que delimitó la zona del contrato de exploración adicional, y aprobó los minerales que se sacarían, un trámite independiente al de licenciamiento y que fue aprobado luego de que la empresa resolviera 545 requerimientos hechos por la Gobernación