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Las bases del proyecto Medellín todos por la vida

Los ejes de la gestión de gobierno de Aníbal Gaviria se enmarcan en la vida y en la equidad. Resalta la menor tasa de homicidios en 40 años: 18,9 %.

  • 1.352 obras físicas ejecutadas, desde el tranvía hasta adecuaciones por valor de $4,5 billones de pesos, son algunas cifras del cuatrienio de Aníbal Gaviría. Vea más cifras en el ícono infografía del lado izquierdo. FOTO Henry Agudelo
    1.352 obras físicas ejecutadas, desde el tranvía hasta adecuaciones por valor de $4,5 billones de pesos, son algunas cifras del cuatrienio de Aníbal Gaviría. Vea más cifras en el ícono infografía del lado izquierdo. FOTO Henry Agudelo
Las bases del proyecto Medellín todos por la vida
01 de noviembre de 2015
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Medellín está en el mejor momento de su historia. Así, de manera tajante, lo afirma el alcalde Aníbal Gaviria Correa, quien lo sustenta con cifras y por reconocimientos internacionales a la ciudad.

Cita la tasa de homicidios más baja de los últimos 40 años: 18,9 por 100 mil habitantes (dato a jueves 29).

Pone de presente que salió de la lista de las 50 más violentas del mundo y que en lo que va de su cuatrienio (hasta el pasado jueves) llevaban 200 días sin homicidios en la ciudad.

Aunque es consciente de que las cifras deshumanizan, ve en esta reducción de muertes violentas, más que el logro de un gobernante, el de la sociedad.

En su sentir, el ideal sería llegar a un porcentaje cero, pero por lo pronto lo anima que la tendencia esté a la baja. Una sola vida es un milagro irrepetible, sostiene, pero 3.000 que se han salvado en lo que va de su mandato, dice, constituyen un gran salto y una conquista.

Capítulo 1: la vida

Pese a cuestionamientos de sectores académicos en el sentido de que mucha parte de esas muertes podrían tener origen en el denominado “pacto del fusil entre los combos”, Gaviria controvierte ese análisis.

A su juicio, la tendencia a la baja de homicidios ya se notaba en los primeros seis meses de su gobierno, lo que se mantuvo todo el primer año, el segundo y el tercero.

Lo que sí admite en su lectura de lo que pasa con el mundo criminal de la ciudad es que los jefes de las bandas han tomado la decisión “de bajar su perfil por miedo a las instituciones”.

El alcalde Gaviria agrega otro punto. “Se quieren hacer menos visibles porque, entre otras cosas, ya no son tan poderosos”.

Su conclusión es que hoy el Estado tiene más capacidad de atacar el crimen por el trabajo articulado de las instituciones: Alcaldía, Policía, organismos de seguridad, jueces y fiscales.

¿Pareciera que el Alcalde solo se enfoca en la reducción de los homicidios? ¿Y los otros delitos que agobian al ciudadano qué?

El mandatario de los medellinenses es enfático en que preservar la vida de cualquier ciudadano es un imperativo moral y ético y por esa vía se atacan otros delitos. El tema de la vida, insiste, es una prioridad de gobierno y que el tema no se mira solo como estadística sino que cada vida que se pierde tiene un nombre. “El tema de la vida lo debemos mirar como si fuera la de uno o la de un hijo”, añade.

Capítulo 2: inclusión social

Y como recalca que la vida es lo prioritario, también lo es el abordaje integral en torno a una sociedad más equitativa.

En esa perspectiva, el Gobierno de Medellín que lidera concentró esfuerzos en la lucha contra la pobreza extrema y la atención de calidad a la primera infancia. Dos de los instrumentos, que venían desde la administración de Alonso Salazar, fueron los programas Medellín Solidaria y Buen Comienzo.

Según Gaviria, se fortalecieron en cobertura y niveles de inversión y trajo a cuento un programa como Maná, creado en la gobernación de su hermano, Guillermo Gaviria, para garantizar la seguridad alimentaria, porque, observa el alcalde, son programas sociales que se deben preservar en el tiempo.

Y cita dos cifras que, en su opinión, son muy significativas: en 2003, en Medellín, el índice de pobreza extrema estaba en 8 por ciento y hoy es del 2,8 %.

La segunda es que 20.000 familias del programa Medellín Solidaria recibieron su grado en ese programa. Quiere decir que dejaron la pobreza extrema y hoy tienen capacidades para no volver a ese condición.

La inversión en primera infancia pasó a 600 mil millones de pesos en el cuatrienio, unos 200 mil millones de pesos más que en el mandato anterior.

De los nueve jardines infantiles Buen Comienzo ya hay ocho en operación y el noveno está en ejecución.

El pilar de la atención en primera infancia se sustenta en la seguridad alimentaria, la educación, el cariño y la alegría, según lo señala el alcalde Gaviria.

Capítulo 3: la educación

Otra página escrita en el presente cuatrienio tiene el título de educación. Gaviria señala que equidad también tiene la e de educación y la e de empleo.

Un gran estímulo que lo consideran jalonador para la sociedad lo constituye el programa de becas en educación superior, con 36.000 usuarios bachilleres y una inversión de $200.000 millones con 11 líneas que conceden créditos a los estudiantes. Son auxilios prácticamente no reembolsables.

En materia universitaria se creó la Agencia de Educación Superior (Sapiencia) como motor jalonador y de punto de enlace para generar sinergias entre las tres universidades públicas de la ciudad: el Instituto Tecnológico Metropolitano (ITM), el Colegio Mayor y el Pascual Bravo.

Las tres hacen gestión coordinada y confluyen en la denominada Ciudadela Universitaria Pedro Nel Gómez, uno de cuyos avances más importantes quedará visible pronto cuando se inaugure un bloque nuevo de siete pisos y tres laboratorios, con una inversión de 23.000 millones de pesos.

Con recursos del Fondo Medellín Ciudad para la Vida se ejecutan otras dos ciudadelas universitarias: la de la Innovación, junto a la Plaza de Ferias, y la de Arte y Cultura, donde antes funcionaba la cárcel de mujeres Buen Pastor.

Otro instrumento es la universidad virtual @Medellín con nodos en los cinco corregimientos de la ciudad. Ponerla en marcha demandó una inversión de 35.000 millones de pesos y tiene 37 programas con la Universidad de Antioquia y la Universidad Católica de Oriente.

Hay mucho más para mostrar en educación, dice el Alcalde. Menciona el centro de formación del maestro Mova, cuya esencia misional fue construida por los propios 11.000 docentes que tiene la ciudad.

Y en esta parte del capítulo de la educación Gaviria resalta el programa de la jornada complementaria, con 86 mil estudiantes en actividades como bilingüismo, deporte, ciencia y tecnología, innovación, medio ambiente y participación. “Toca las actitudes y las aptitudes de los jóvenes”, señala.

Como logro de la jornada complementaria se desprende una disminución de la deserción en más de seis puntos porcentuales y una mayor permanencia de los estudiantes de grado 9, uno de los claves en la secundaria.

Pero de la mano de la educación, dice Gaviria, está el deporte, cuyo liderazgo lo ejerce el Inder, una institución muy apreciada por los ciudadanos, según lo registró la encuesta de percepción de Medellín Cómo Vamos.

“El Índer está en el corazón de los habitantes de Medellín”, no duda en afirmar el Alcalde.

25 canchas sintéticas nuevas, 60 gimnasios al aire libre, 530 mil usuarios y 700 mil millones de pesos de presupuesto es el volumen de todo lo que mueve el Índer.

Capítulo 4: sostenibilidad

¿Y qué sigue? ¿Qué retos vienen? Para el alcalde de Medellín es fundamental, además del camino recorrido en equidad, dejar sentadas unas bases para un futuro sostenible de la ciudad y amigable con el medio ambiente. En su sentir, el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT) marca un camino a futuro al privilegiar el peatón, la bicicleta y el transporte público ecológico y eficiente.

Y cae en una de las obras más cuestionadas de su gobierno: Parques del Río. Un proyecto visto por no pocos académicos como no prioritario, pero defendido por Gaviria como un colchón o pulmón de ciudad para mitigar el cambio climático en su componente local.

Defiende la intencionalidad de no darle más la espalda al río Medellín, sino de recuperarlo y protegerlo, en virtud de que en los últimos años se han invertido alrededor de 1.500 millones de dólares en su saneamiento y otros programas de conservación.

Solo la planta de aguas residuales de Bello, en construcción, demanda una inversión de 550 millones de dólares por parte de EPM. Le aportará al río Medellín el mínimo de oxígeno para producir vida.

Su criterio es que la ciudad no resiste más una expansión hacia los cerros sino compactarse más y que el eje del río da esa opción. En cuanto a los bordes, resalta el impulso al Jardín Circunvalar, en la parte oriental de Medellín, como barrera de contención a la expansión.

Estos ejes de acción, según el Alcalde, ponen a la ciudad en un buen momento, son las bases del eslogan del cuatrienio: Medellín todos por la vida .

Infográfico

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