Han pasado veintiún días desde que Alba Rocío Montoya, auxiliar de enfermería de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital General de Medellín, fue designada como la primera vacunada contra covid-19 en la ciudad.
Y aunque ella afirma que la vida no le ha cambiado mucho, cuenta que en la calle la han reconocido. En una cafetería del centro le pagaron la cuenta en agradecimiento a su labor al frente del personal médico que batalla contra la covid-19 y en el gimnasio a donde va la recibieron con aplausos cuando fue después de esa primera vacuna.
“Ha sido muy chévere porque en ciertos espacios la gente me reconoce, justo esta semana en mi servicio, una señora, que yo le estaba cuidando al papá, me dijo: ‘Usted se parece a la primera vacunada de Medellín’. Entonces yo le dije que sí, que era yo. La señora empezó a reírse toda emocionada y me dijo que su papá iba a estar muy bien cuidado y más si yo ya estaba vacunada”.
Este jueves 11 de marzo recibió a las 3:10 de la tarde, y también en su brazo izquierdo, la segunda dosis de la vacuna Pfizer que le brindará inmunidad contra el virus: “Con la segunda dosis sentí el mismo calorcito pero nada en especial”.