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Tranvía Ayacucho: una apuesta por la movilidad sostenible
El tranvía es una solución de transporte que pretende impactar menos el aire que respiramos.
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El compromiso de los ciudadanos con el sistema será fundamental, toda vez que el mismo comparte vía con peatones, ciclistas y carros. FOTO HENRY AGUDELO
11 de octubre de 2015
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El tranvía nuevo que es eléctrico, y no genera directamente emisiones, llegará al Centro de Medellín, una de las zonas de la ciudad que presenta grandes emisiones de gases y partículas, producto de la combustión del tráfico vehicular.
Por ello, las personas que transitan por el Centro perciben constantemente la contaminación del aire que respiran. “El sistema actual de transporte no es compatible con combustibles amigables con el medio ambiente, de acuerdo con lo expresado por Sebastián Angarita Gutiérrez, estudiante de ingeniería civil de la Universidad Nacional y miembro del grupo de investigadores que propuso la construcción de un muro de plantas para filtrar el aire en la Avenida Oriental.
No obstante, este medio de transporte de pasajeros, tiene bajo consumo de energía eléctrica. “Un vehículo eléctrico logra eficiencias superiores al 95 por ciento. Uno con motor de combustión solo llega a una eficiencia no superior al 55 por ciento”, explicó Jaime Pérez Naranjo, jefe de tranvías.
“Cuando hablamos del 95 por ciento, nos referimos a que inyectamos combustible y la entrada es casi igual a la salida. En cambio, si usamos un motor de combustión, a este le suministramos mucho combustible para producir una potencia determinada”, explicó.
Agregó Pérez Naranjo, que ese 45 por ciento, ya que la eficiencia, no es superior al 55 por ciento, en un motor de combustión, se pierde en temperatura, fricción y contaminación”.
De igual forma, el tranvía tiene bajo consumo de energía eléctrica debido a que gracias al diseño arquitectónico se optimiza la luz natural en acceso de estaciones y paradas.
Para el experto en Movilidad, Rodrigo Salazar Pineda, es un sistema amigable con el medio ambiente, puesto que tiene tracción eléctrica y el sistema energético del país es principalmente hidráulico, es decir, la fuente de generación de energía es el agua.
Medellín, como muchas ciudades requieren de mezclas de modos de transporte: tranvía, cables, metro y buses. “Bienvenido el tranvía” señaló el experto en movilidad.
El aporte al ecosistema también se verá reflejado con la siembra de unos 1.400 árboles ubicados a lo largo del tranvía y sus dos cables, así como en otros lugares de la ciudad.
Otro aporte a la tierra es: el tranvía y los dos cables usan energía eléctrica y de esta manera evitan la emisión de contaminantes a la atmósfera.
Las cifras del Metro de Medellín dan cuenta que se dejarán de emitir cerca de 7.356 toneladas de co2 anualmente con esta solución de transporte.
Cabe anotar, que según el Área Metropolitana, en el Valle de Aburrá “el material particulado menor a 2.5 micrómetros (PM2.5) y el ozono (O3), son los contaminantes más críticos, responsables de una calidad del aire moderada que persiste durante la mayor parte del año”.
De ahí que la autoridad ambiental clasificó la Cuenca del Valle de Aburrá como un área fuente de contaminación por material particulado menor de 10 micrómetros.
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