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Con el apoyo de 30 voluntarios venezolanos, de 100 funcionarios de seguridad, representantes de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres, Ungrd, una comitiva de la Usaid y de la Embajada de Estados Unidos, empezó ayer el proceso de empaque de la ayuda humanitaria para el pueblo venezolano. Aunque nadie confirma cómo se transportará, se rumora que será a través de una gran movilización de venezolanos que harán un corredor humanitario.
Todo este proceso se realiza en el puente internacional “Tienditas” en Norte de Santander –a unos 30 minutos del centro de Cúcuta– en donde se pudo conocer que cada una de las bolsas llegará a unas 5.000 familias, que tendrán suministros para una semana de alimentación. Todas tienen harina, azúcar, café, arroz, lentejas, panela, atún, suplementos nutricionales y galletas.
El centro de acopio de “Tienditas” que tiene una extensión de 150.000 metros cuadrados, con capacidad para almacenar 500 camiones de ayuda humanitaria, (del lado colombiano) también se encuentran kit de medicamentos, productos farmacéuticos para ser llevados a hospitales, cuatro kit de emergencia (quirófanos ambulatorios) para usar en una población de 10.000 personas, durante un tiempo estimado de 90 días.
El director de la Ungrd, Eduardo José González, precisó que se han cumplido tres de los cinco pasos acordados entre los gobiernos de Colombia, Estados Unidos y el presidente interino de Venezuela, Juan Guaido, para la llegada de la ayuda humanitaria.
“Los tres primeros pasos ya se cumplieron: el ingreso, nacionalización y marcaje de la ayuda, luego el desplazamiento de la misma a la zona de frontera y el tercero el acopio. Solo queda por cumplir el desplazamiento hacía Venezuela y la distribución”, dijo.
En representación de Juan Guaidó, presidente interino de Venezuela, asistió a la visita a la zona de recolección de ayudas, el dirigente del partido Voluntad Popular (VP) y responsable internacional del Plan de Ayuda Humanitaria, Lester Toledo, quien anunció que llegará en los próximos días “un tsunami” de mercados para los venezolanos. “Esta ayuda va a llegar y se van a abrir las puertas para la libertad. La lucha por los Derechos Humanos no puede tener fronteras geográficas ni ideológicas ni políticas”, dijo.
Estas ayudas, señaló, van a llegar a los hospitales y a las manos de las familias más vulnerables. “En los próximos días se van a sumar decenas de países que ya nos están llamando y habrá tres centros de acopio más en tres países de la región estableciendo una alianza multilateral. Los camiones que han llegado no solo traen alimentos, también llegan cargados de esperanza”, dijo.
Toledo precisó que “ya sabemos cómo, cuándo y con quién” van a llegar las ayudas. Y solo dijo que “será con la inmensa mayoría del pueblo venezolano”.
En ese sentido, recordó la gesta que libraron el 5 de julio del 2016 las llamadas “mujeres de blanco” en la frontera, “gracias a esas valientes y aguerridas damas, sin violencia y sin un disparo se logró abrir nuevamente la frontera. En ese momento el pueblo dijo basta, se cansó y así será de nuevo”.
El embajador de Estados Unidos en Colombia, Kevin Whitaker, indicó que se está cumpliendo una campaña humanitaria con base moral y ética, afianzada en aliviar el dolor y el hambre del pueblo venezolano y es legal porque tiene la autorización del gobierno interino de Venezuela.
“Hace 206 años, aquí se inició la Campaña Admirable (que dio con la libertad de Venezuela), señores militares y tropa de las Fuerzas Armadas de Venezuela, ahora mismo tienen la oportunidad de ser parte de la gran campaña humanitaria para empezar el proceso de dar respuesta a los problemas de su país, es una oportunidad para ustedes y en esa decisión deben contar sus esposas, hijos y madres (...) todos la van a recordar y también nosotros en el mundo entero”.