El expresidente y exsenador Álvaro Uribe aprovechó la visita del Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, por los cinco años de la firma del Acuerdo de Paz, para compartirle una carta en la que le expone sus críticas al documento del cual el organismo fue garante.
En la carta de 26 puntos, el exmandatario fue tajante al afirmar que "Acuerdo de Paz no ha habido" ya que, a su juicio, el proceso con la extinta guerrilla de las Farc fracturó la legislación nacional y así mismo desafió a la internacional "al dar impunidad total y elegibilidad política a personas responsables de delitos atroces, por ejemplo, de secuestro y violación de menores", según sostuvo.
Esta afirmación la sustentó en que varios integrantes del equipo negociador del Gobierno han señalado "graves fallas del proceso de negociación y del Acuerdo. También de incumplimientos de Farc" escribió.
Uribe manifestó a Guterres que se atrevió a escribirle la misiva en “condición de judicializado por razones políticas”, haciendo referencia al proceso judicial que se adelanta en su contra.
Del mismo modo, se quejó de que, pese a la victoria del “NO” en el plebiscito votado en 2016, "ninguna reforma importante del Acuerdo fue aceptada", luego de que los promotores de esta postura propusieron un "Pacto Nacional" para reformar los textos acordados en La Habana.
Narcotráfico y sustitución de cultivos
En la carta, Uribe fue enfático en que, tras la firma del Acuerdo y por la "permisividad con el narcotráfico de las Farc, elevada a rango Constitucional", el país pasó, según la medición de la ONU, de 45.000 hectáreas de coca, aproximadamente, entre 2012 y 2013, a más de 150.000 en 2018, cuando Iván Duque asumió la Presidencia.
"El Acuerdo y las medidas concordantes del Gobierno de entonces, como la prohibición de la fumigación, dejaron al actual Gobierno en serias dificultades para erradicar esos cultivos", expresó.
Así mismo, señaló que los programas de sustitución que dejó el anterior Gobierno, el de Juan Manuel Santos, resultaron "muy costosos e ineficientes" y aseguró que el país ha tenido otros programas "mucho más efectivos, desconocidos en el Acuerdo de La Habana".
"Muchas personas reciben el dinero, eliminan la droga en algunas parcelas pero en el entorno se amplían los cultivos. En la práctica no existen los compromisos colectivos o no se cumplen", agregó.
Ese panorama, apuntó, "sembró un Estado criminal alternativo que se constituye en seria amenaza al Estado de Derecho".
En defensa de Duque
En la carta, Uribe también dedicó varios puntos a defender a Iván Duque, que llegó al poder en 2018 con el respaldo de su partido, el Centro Democrático.
El exmandatario calificó de "totalmente injusto" que se culpe al Gobierno actual del asesinato de líderes sociales y de excombatientes de las Farc, cuando "la mayoría de esos crímenes han ocurrido en zonas de narcotráfico".
Agregó que "le parece paradójico que mientras el actual Gobierno de Colombia se caracteriza en su afán por la protección del Medio Ambiente, el mal llamado Acuerdo de Paz sea promotor de la destrucción de los recursos naturales y de nuestra juventud".
El mandatario cerró la carta con una reflexión: "En Colombia el amor no ha sido escaso y el perdón ha sido una constante, tal vez la polarización de esta coyuntura requiera un aporte a la sanación; ni los promotores del acuerdo son guerrilleros ni paramilitares sus opositores".