Ciudadanos de China, Venezuela, Cuba, México y Ecuador lograron hacerse a la nacionalidad colombiana de manera fraudulenta por cuenta de una red que fue desarticulada por la Fiscalía, durante una operación que contó con el apoyo el Servicio de Seguridad Diplomática de la Embajada de Estados Unidos.
La banda venía delinquiendo desde 2016, de acuerdo a lo consignado en el informe, que servirá de base para imputarles cargos a sus 13 integrantes por tráfico de migrantes, falsedad ideológica en documento público, falsedad material en documento privado, obtención de documentos públicos falsos, uso de documento público falso, cohecho propio, cohecho por dar u ofrecer, fraude procesal, acceso abusivo a un sistema informático y concierto para delinquir.
El extenso prontuario obedece a que, aparentemente, esta banda logró extractos bancarios y declaraciones de renta, entre otros documentos espurios, para presentarlos ante las autoridades nacionales con el fin de acreditar un sólido historial financiero de los extranjeros para que se les concediera la estadía o el tránsito a otros países.
El cabecilla de la organización fue identificado como C. A. Bernal Cruz, que hizo parte del antiguo Departamento Administrativo de Seguridad y que, conforme a la investigación, se encargaba de gestionar y organizar el personal para obtener los mencionados documentos.