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Luis Eduardo Carvajal Pérez, alias “Rambo”, está cada vez más cerca de responder ante la justicia estadounidense. Este miércoles la Corte Suprema de Justicia autorizó su extradición a ese país, que lo acusa desde 2017.
En un documento de 59 páginas, la Sala Penal del alto tribunal dio vía libre para que el exjefe de la columna “Daniel Aldana”, de las exFarc, responda ante Estados Unidos por los delitos de narcotráfico y obstrucción a la justicia, que le endilga la Corte del Distrito Sur de Florida.
No obstante, la Corte puso una condición importante. Antes de que se concrete el envío, “Rambo” tiene un pendiente por resolver con la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), a la cual la Sala Penal exhortó con el fin de conocer en qué estado se encuentra la contribución a la verdad del exguerrillero hacia las víctimas.
Es de recordar que la justicia especial lo había rechazado, en junio pasado, tras encontrar que después de haberse desmovilizado siguió en actividades ilegales, como el tráfico de drogas y conversaciones con carteles mexicanos.
Es por esto que su expediente pasó a la Corte Suprema, la cual hoy le dio seis meses a la JEP para que remita al Gobierno información de dos escenarios posibles por los que puede pasar “Rambo” antes de aterrizar en Norteamérica.
La salvedad
El primer escenario para la luz verde hacia Estados Unidos es que el exguerrillero haya terminado el cuestionario preparado por la Sala de Reconocimiento de la JEP, en el marco del macrocaso 02, dentro del cual está actualmente ofreciendo verdad y reparación a las víctimas.
El otro es que la Sala informe si Luis Eduardo Carvajal dejó de cumplir lo que pactó ante el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición. En ese sentido, la Corte reiteró que “el aval de la extradición, entonces, deberá armonizarse con la protección de los derechos a la verdad, justicia, reparación y no repetición que asisten a las víctimas del conflicto armado interno”.
Y aunque el llamado de la Sala Penal dentro de ese lapso es a que se esclarezca si dará o no su versión, una vez se cumpla ese plazo el Gobierno podrá disponer de su envío. Ese trámite lo haría, en todo caso, a través del Ministerio de Justicia y del Derecho, al cual se le envió el expediente.
Por otro lado, además de esa condición especial, otra salvedad a nivel general es que a “Rambo” se le garantice su debido proceso y que, en caso de cumplir con la justicia estadounidense y pueda volver a Colombia, esta se cumpla “en condiciones de dignidad y respeto”.
El exjefe de la columna “Daniel Aldana”, que operaba en el suroccidente del país, actualmente se encuentra en cárcel La Picota, de Bogotá, lugar en el que espera que se concrete su extradición.
Durante los años 2003 y 2010 fue uno de los principales narcotraficantes al servicio de las Farc, dinamizador de los cultivos ilícitos en Nariño y su exportación al mercado transnacional de drogas, en alianza con traficantes mexicanos, centroamericanos y ecuatorianos.
Las millonarias ganancias ilícitas que lograba la columna móvil Daniel Aldana bajo su mando, financiaban el funcionamiento de otros frentes de las Farc.