Hace tres días cayó en el puerto de Rotterdam, Holanda, un cargamento de más de una tonelada de cocaína procedente de Colombia camuflada en aguacates. El resultado de esa incautación se dio gracias a la coordinación entre la Policía Nacional colombiana y autoridades de varios países europeos.
Esa colaboración es el reflejo de una de las más efectivas estrategias de la lucha global contra las drogas que, como lo asegura el general Fabián Laurence Cárdenas, director de la Policía Antinarcóticos, se acordó en el congreso sobre el tema que se realizó hace una semana en Medellín, en el que la conclusión fue una sola: “se deben aunar esfuerzos para combatir el narcotráfico en el hemisferio”.
Sin embargo, la necesidad de aumentar la operatividad y mostrar mejores resultados en la lucha contra los alucinógenos, obliga a los gobiernos y las autoridades civiles, militares y de Policía a mirar otras propuestas (consideradas en dicho congreso) que apunten a combatir el consumo, las nuevas drogas y otras cadenas del narcotráfico.
Entre las conclusiones a las que llegaron los 23 países de América y Europa presentes en el congreso, se estableció la implementación de procesos de desarrollo tecnológico e innovación que permitan la identificación y detección de nuevas sustancias psicoactivas, esto por las alarmas que se tienen prendidas ante la elevada producción y consumo de drogas sintéticas.
“También está la ejecución de mayores controles frente al tráfico y comercio de drogas a través de internet. Igualmente se debatió sobre la creación de un comité de expertos, tanto técnicos como normativos, de alcance internacional, para la detección y control de precursores y sustancias químicas, generando las alertas tempranas y el fortalecimiento de los procesos de judicialización”, añadió el general Cárdenas.