La supresión del Consejo Superior de la Judicatura, la creación de la Comisión de Aforados, la prohibición del “yo te elijo, tú me eliges” y la inhabilidad por cinco años para que los magistrados salientes de un alto tribunal no puedan litigar ante esas corporaciones son solo algunos de los puntos de la reforma de poderes que podrían tener molestos a los togados.
Para el expresidente del Consejo de Estado, Luis Fernando Álvarez, es difícil tratar de saber las razones de la molestia de los jueces. “Pareciera que los magistrados consideran que la famosa Comisión de Aforados sigue siendo un organismo inútil y muy parecido a la Comisión de Acusaciones, entonces dicen que ese tribunal se quedó a mitad de camino”, afirmó Álvarez.
La Comisión de Aforados ha sido uno de los temas más espinosos de la reforma porque quedaría facultada para investigar a los altos funcionarios del Estado, incluyendo a los magistrados, y reemplazaría a la Comisión de Acusación de la Cámara que ha sido un monumento a la impunidad.
La reservas de los jueces con la Comisión de Aforados se remontan a los primeros debates en el Congreso donde era concebida como un verdadero tribunal, es decir, tendría la facultad de investigar y juzgar a los magistrados de las altas cortes, por lo que estas consideraron que se estaría acabando con su carácter de órganos de cierre.
Se acaba el “roscograma”
Otro de los puntos que toca con los intereses de los jueces es la prohibición del “yo te elijo tú me eliges”, que consistía en que una vez un magistrado culminaba su periodo en una de las altas cortes era ternado para otra corporación por parte de los compañeros que él mismo ayudó a elegir. De aprobarse la reforma a los servidores públicos les estará prohibido contratar postular o nombrar a familiares o personas que hayan intervenido en su postulación para el cargo.
En lo que tiene que ver con la eliminación del Consejo Superior de la Judicatura, es apenas entendible el malestar de los jueces pues el nuevo órgano estaría compuesto por magistrados sino por administradores expertos en gerencia pública y además sería una entidad mucho más pequeña y con menos presupuesto.
Por último, hasta el momento, en lo aprobado en seis de los ocho debates que debe surtir el proyecto de acto legislativo para convertirse en reforma constitucional, se decidió aumentar los requisitos para aquellos abogados que quieran llegar a ser magistrados de las cortes, además, aunque en el último debate no fue aprobada, lo más seguro es que en la Cámara se reviva la inhabilidad de cinco años para que los magistrados puedan litigar ante los tribunales a los que habían pertenecido dándole más transparencia a la administración de justicia.
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de experiencia deberán tener los abogados que quieran aspirar a llegar a las altas cortes si se aprueba la reforma.