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Apoyo del uribismo, ¿le sumará o le restará a Federico Gutiérrez?
Zuluaga desistió de su aspiración para unirse a la candidatura del exalcalde de Medellín, quien se arriesga a ser tildado desde ahora como candidato del continuismo.
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Tres meses y 21 días duró la segunda candidatura presidencial de Óscar Iván Zuluaga por el Centro Democrático. Aunque decía que iba firme a la primera vuelta, finalmente declinó. FOTO Colprensa
15 de marzo de 2022
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La salida de Óscar Iván Zuluaga del partidor presidencial abrió la puerta para confirmar un secreto a voces: que el grueso del Centro Democrático está con Federico Gutiérrez.
De hecho, Zuluaga reconoció que da un paso al costado para sumarse a la candidatura del exalcalde de Medellín, decisión que tomó luego de ver que su llamado a que el uribismo no votara en las consultas del domingo –sino que solo lo hiciera por Senado de la República y Cámara de Representantes– fue ignorado, incluso, por el presidente Iván Duque, uno de los carnetizados del Centro Democrático.
“En vista de los resultados electorales del día de ayer (domingo) y de la necesidad de unidad por el bien de Colombia, he tomado la decisión personal de renunciar a la candidatura por el Centro Democrático para acompañar la aspiración de Federico Gutiérrez”, enfatizó el ahora excandidato, quien leyó que gran parte de los 2,1 millones de votos del exalcalde antioqueño le llegaron desde el uribismo.
Tras confirmarse que Zuluaga se hacía a un lado, el aspirante antioqueño aseguró que no se trata de un apoyo de partido sino personal del ahora excandidato. “Le agradezco a Óscar Iván porque es una decisión personal que nada tiene que ver con el partido. Me llamó y se suma a la campaña sin poner condicionamientos”, dijo Gutiérrez.
Planteó que vendrán más apoyos de otros sectores políticos, pero insistió en que su aspiración es independiente.
Hay resistencias internas
El expresidente Álvaro Uribe tiene una relación personal –y en algunas ocasiones política– fluida con Gutiérrez, al punto que lo acompañó con sus concejales en su mandato como alcalde de Medellín (2016 - 2019) y han dialogado un par de veces durante la presente campaña.
Por eso, este martes, cuando Uribe dirija la primera cita presencial de su bancada luego de perder cinco curules en Senado y 16 en Cámara tras las votaciones del domingo, y más de 600.000 votos al Senado, se llegará a una conclusión a la que solo le falta ser oficializada: el Centro Democrático –en bloque– apoyará a ‘Fico’, pese a varias resistencias internas que persisten.
Una de ellas es de la reelecta senadora María Fernanda Cabal, quien inicialmente aseguró que la decisión de Zuluaga no compromete a la colectividad, pero luego aseguró que es un camino acertado porque “está pensando primero en la patria antes que en vanidades o egos electorales”.
Cabal ha lanzado críticas públicas contra Gutiérrez y ha planteado que el exalcalde de la capital paisa podría ser un “Iván Duque 2.0” si llega a la Casa de Nariño este año.
A pesar del intento de veto de la senadora Cabal, Gutiérrez ha recibido el respaldo de otras fichas uribistas como los congresistas Ernesto Macías, Paola Holguín y Edward Rodríguez, quienes tienen pública cercanía al presidente Duque.
¿Fico se arriesga con Uribe?
La pregunta que ahora queda es qué tanto le resta o le suma al candidato antioqueño tener el apoyo uribista oficial, pues él ha intentado mantenerse alejado de las líneas partidistas tradicionales y ha insistido en que no ha sido militante del Centro Democrático, aunque en una reciente entrevista con EL COLOMBIANO invitó a esa colectividad a votar por él en la consulta que pasó.
“Tengo respeto y aprecio por el expresidente Álvaro Uribe y por muchos integrantes del Centro Democrático. Sin interferir en temas internos de partidos, yo quiero invitar a las bases del Centro Democrático a que me acompañen y voten por mí”, le dijo Gutiérrez a este diario.
Recibir el apoyo de Uribe y su partido públicamente podría meter a este candidato que se autodenomina “independiente” en la narrativa del continuismo del gobierno Duque, quien llegó al poder hace cuatro años con las banderas políticas del expresidente.
Y es que el hecho de ser el elegido por Uribe para llegar a la Presidencia y hacerle frente a la candidatura de Gustavo Petro podría implicar que Gutiérrez lleve a cuestas la desaprobación ciudadana de Iván Duque, que llegó al 71 % según la encuesta de febrero de la firma Invamer.
Para el director del Grupo de Estudios de la Democracia de la Universidad del Rosario, Yann Basset, la alianza de ‘Fico’ con el partido de gobierno podría representar un riesgo en términos electorales del que incluso esa convergencia reconoce, ya que, según él, se ha visto opacada por cuenta de la desaprobación de Duque.
“El Centro Democrático y Álvaro Uribe eran conscientes de que era difícil que como partido jugaran un papel clave en la elección presidencial teniendo en cuenta esa baja popularidad de Duque y el estallido social que hubo en 2021 por decisiones tomadas por su gobierno”, dijo el académico.
Gutiérrez es consciente de esa situación y ha intentado tomar distancia para que no se catalogue como el candidato del continuismo. Ha sido crítico en temas como la seguridad –principal bandera del uribismo–, pero rescata avances con programas como Ingreso Solidario y la vacunación contra el covid-19.
Lo cierto es que a ‘Fico’ no le incomoda tener el apoyo electoral de otros partidos tradicionales como el Partido Conservador y Partido de la U, que están en Equipo por Colombia, e incluso ha convocado a otras colectividades como Cambio Radical
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