viernes
7 y 9
7 y 9
Aunque la banca de inversión de Estados Unidos, Goldman Sachs, presentó una carta de intención para financiar el proyecto de navegabilidad del río Magdalena —uno de los proyectos clave para el desarrollo del país— Navelena sigue sin concretar el cierre financiero.
El proyecto, que demanda una inversión de 2,5 billones de pesos y que según los cronogramas iniciales ya debería estar en su etapa de ingeniería, no ha logrado cerrar su etapa financiera debido a que desde los primeros días de mayo el principal accionista del consorcio Navelena, Odebrecht, cedió su participación accionaria e inmediatamente comenzó a buscar un accionista que lo respaldara.
Ayer, justo cuando se vencían los términos del contrato y se podía declarar su caducidad, Cormagdalena informó que el asociado Navelena SAS, no presentó la documentación que acredita el cierre financiero del Proyecto de Asociación Pública Privada APP. Sin embargo, sí presentó, tal como lo prevé el contrato, un plan y cronograma definido para corregir el incumplimiento de dicho requisito. En ese sentido, la audiencia de caducidad fue suspendida.
Lo que sigue ahora, en consecuencia por lo que pasó ayer, es que la Corporación a través del supervisor del contrato, “procederá a revisar la documentación entregada para determinar si es una solución financiera definitiva, suficiente que garantice la viabilidad del proyecto en el largo plazo. La decisión final se conocerá cuando se reanude la audiencia en fecha que se notificará posteriormente”.
En ese sentido, cabe anotar que dentro de la documentación recibida, se encuentra la carta de intención de Goldman Sachs. Así mismo, la banca entregó el documento de condiciones con detalles sobre las características previstas del financiamiento y un cronograma con los plazos y avances hacia la consecución del cierre financiero en firme.
Es importante destacar que a toda la discusión financiera que hay detrás del proyecto de navegabilidad, se le suma un trasfondo político complejo, ya que este es uno de los proyectos de infraestructura más grandes que se ejecutaría en la administración del presidente Santos. Con este marco, la semana pasada renunció el tercer director que ha tenido Cormagdalena desde que se adjudicó el contrato en 2014, el capitán Álvaro Mendoza. Aunque el funcionario no ha querido dar declaraciones, se ha señalado que su salida corresponde a presiones políticas.
El senador José David Name, quien ha estado al tanto del proyecto, indicó que es normal que el Gobierno analice lo presentado por Navelena. “La propuesta del banco internacional es muy seria y lo que quiere el Gobierno es que se haga el proyecto. En este momento estoy optimista por dos razones: la banca internacional sigue creyendo en Colombia, y se logró salvar el proyecto de las garras de Germán Vargas, ya que él quería apropiarse del contrato”.