viernes
7 y 9
7 y 9
Donación de 8.000 libros para Antioquia esperan su ayuda
El destino final de estos títulos son las 25 bibliotecas que integran la Red de Bibliotecas Populares y Comunitarias de Antioquia. ¿Se anima a ayudar?
-
La biblioteca comunitaria del barrio Santander de Medellín es una de las 25 que hacen parte de Rebipoa y que se beneficiarían con los libros que lleguen de España. FOTO Cortesía Rebipoa
08 de mayo de 2022
bookmark
En Barcelona, España, hay 8.000 libros esperando cruzar el Océano Atlántico para que los usuarios de 25 bibliotecas populares y comunitarias de Antioquia los destapen y los lean. O les cambien la vida, porque hasta estos lugares llegan a diario niños, jóvenes y madres cabeza de familia buscando inspiración.
Desde hace dos años, la organización cultural Libros Libres, que fomenta la promoción de la lectura en Latinoamérica, bajo la dirección de Ricardo Rei y un grupo de voluntarios, se dieron a la tarea de recoger los títulos que son descartados en las bibliotecas públicas de la ciudad europea y donados por particulares y autores para enviarlos a Colombia y renovar las colecciones de las bibliotecas que integran la Red de Bibliotecas Populares y Comunitarias de Antioquia (Rebipoa).
Rei dijo que han participado diferentes instituciones. L’Auditori de Barcelona (Auditorio de Barcelona), por ejemplo, ha colaborado con 600 ejemplares nuevos de pedagogía musical infantil. La editorial Edebé, especializada en literatura infantil y juvenil, realizó una donación de material nuevo de primera calidad.
“Hemos puesto especial interés en la literatura infantil y juvenil, pero hay de todo. Novela, cuento, poesía, ensayo, arte, fotografía, libros didácticos, entre otros”.
Para que estos libros lleguen a su destino final se requiere por lo menos 25 millones de pesos para cubrir los gastos de gestión y transporte: los envían en barco hasta el puerto de Cartagena y luego en camiones a Medellín.
Por eso, Libros Libres y Rebipoa abrieron una Vaki (plataforma de financiamiento colectivo) para recolectar el dinero necesario que les permita cubrir estos gastos.
“Es importante traer estos libros porque estas bibliotecas no tienen recursos propios para comprarlos y funcionan a partir del voluntariado, entonces ayudarían a activar los procesos de promoción de lectura, escritura y oralidad”, dijo Anamaría Bedoya, coordinadora de Libros Libres.
Comprar esa misma cantidad (8.000) de textos en Colombia, por ejemplo, costaría más de 100 millones de pesos, explica Bedoya.
“La llegada de estos libros a Antioquia representa aire fresco, alternativas. Es una forma de comunicarles a las bibliotecas que estamos atentos a ellas, porque estos espacios necesitan atención verdadera, sentirse parte y, sobre todo, recursos, sin renunciar a su esencial autonomía. Tenemos claro que lo más importante de estos espacios es esa esencia de la cual han surgido y nuestra intención es potenciarla y fortalecerla”, dijo Rei.
Por su parte, Joaquín Arley Orozco, coordinador del comité de proyectos de Rebipoa, señaló que este material será distribuido en las bibliotecas asociadas a Rebipoa que están en Medellín, Bello, Envigado, Itagüí, El Carmen de Viboral y Heliconia. Sin embargo, no descartan llegar a más municipios del departamento.
“Son bibliotecas que funcionan con libros donados, incluso hay unas que tienen más de 30 años de existencia y todavía conservan esas primeras donaciones, esta es una oportunidad muy bella para renovar un poco sus contenidos, temáticas y llenar de mucha más literatura esas estanterías”, dijo Orozco.
Una gran ayuda
Tener estos libros en estas bibliotecas sería darles un respiro, que se renueven, porque aunque el panorama general no es desolador, tampoco se puede decir que atraviesan su mejor momento: como muchas organizaciones del sector cultural afrontan varios tipos de crisis: financiero (no tienen apoyo del Estado), de voluntariado y relevo generacional.
Y algo más preocupante. Según Orozco, en toda Antioquia existen por los menos 50 bibliotecas populares y comunitarias y solo Medellín cuenta con convocatorias de estímulos para ellas. Sin embargo, dice él, “son insuficientes”: este año salieron cinco becas de 10 millones de pesos para más de 30 que hay en la ciudad. “Eso no resuelve el problema estructural”.
Rebipoa viene adelantando conversaciones desde el año con bibliotecarios de Argentina, Perú y Brasil para analizar la posibilidad de constituir una red latinoamericana de bibliotecas populares y comunitarias. La idea es crear alianzas y nuevos proyectos que ayuden a la promoción de la lectura: abrir los horizontes, algo que se puede lograr por medio de los libros.
Si se quiere sumar a esta campaña, ingrese a este enlace donde está habilitada la Vaki.
Te puede interesar
El empleo que busca está a un clic
