Nacional aplazó 90 minutos la definición del título continental. Un gol de Independiente del Valle a tres minutos del final acabó con la esperanza verde de traerse un resultado a favor que le diera la tranquilidad de sellar en casa el anhelado triunfo.
De visita en Quito, los dirigidos por Reinaldo Rueda comenzaron a buscar el segundo título del cuadro antioqueño en la Libertadores. Un sueño que ha sido esquivo desde hace 27 años, cuando los puros criollos le dieron la primera alegría continental a los hinchas verdolagas.
Un gol de Orlando Berrío puso en ventaja a los visitantes en el Olímpico de Atahualpa. Tras una asistencia de Macnelly Torres en el minuto 36, el delantero cartagenero remató un potente balón desde fuera del área que no pudo ser detenido por el arquero Librado Azcona. ¡Y la alegría era verde!
En la etapa inicial, Nacional lució ordenado y tranquilo, jugando con la necesidad del local que intentó abrir el marcador en varias ocasiones, pero fueron más las llegadas de riesgo del conjunto paisa que demostraban por qué es considerado el mejor equipo del torneo.
Con un buen manejo del balón y salidas rápidas por las bandas, Nacional se acercó al gol. Macnelly, Marlos y Borja generaron peligro, pero fallaron en sus remates. El verde de la montaña no decayó en sus aspiraciones y vio por fin retribuida su insistencia con la jugada colectiva de Torres y Orlando Berrío.
Tras la apertura del marcador, Nacional fue más agresivo, se tomó confianza y siguió buscando el segundo gol, que estuvo cerca luego de un remate de media distancia de Marlos que rozó el larguero.
Ya en la segunda parte, Independiente fue superior al elenco antioqueño, que poco pudo salir de su área para intentar aumentar el marcador.
Nacional fue táctico y supo frenar las oportunidades de gol del local, que exigió la respuesta eficaz del arquero Franco Armani. Pero a tres minutos del pitazo final, en una jugada rápida en el corazón del área, Arturo Mina sorprendió a la defensa verde y convirtió el empate para los ‘negriazules’.
De ahí en adelante todo fue sufrimiento para los de Rueda, que vieron como los locales se adueñaron del juego y buscaron remontar el marcador.
Empate que deja abierta la serie, pero que no acaba con las ilusiones verdes de hacer realidad el anhelado sueño continental.
