Como un verdadero “gallo”, así se defiende el ecuatoriano Richard Carapaz en la Vuelta de la Juventud, la cual lidera gracias a sus pedalazos certeros, esos que impresionan más cuando la carretera se empina.
Carapaz, del equipo (Strogman), había expresado que defendería la camiseta amarilla de líder hasta el final, y ayer dejó claro que tiene condiciones para cumplir su deseo, luego de una gran demostración de poder en la etapa reina de la competencia, la cuarta, que tuvo un trayecto de 141,6 kilómetros, con salida en Riosucio y final en Concordia, donde a 300 metros para la meta estaba el premio de primera categoría.
A Concordia el ecuatoriano entró victorioso luego de 3 horas, 28 minutos y 40 segundos, y ratificó que su triunfo el pasado miércoles no fue casualidad.
“Estamos dispuestos a darlo todo y ganar la Vuelta de la Juventud”, había expresado el ecuatoriano, que en la vuelta a su país el año pasado, perdió el título por un segundo de diferencia frente a su compatriota Juan Carlos Pozo.
Ayer, en la segunda posición de la dura fracción que terminó en suelo antioqueño, arribó Aldemar Reyes (GW), a 11 segundos, y ahora escolta a Carapaz en la general a 1.54.
Tercero terminó Jorge Gómez (Lotería de Boyacá), a 12, que ocupa este mismo lugar en la general a 2.05. “La carrera está abierta, aunque el líder amplió la diferencia, voy a darlo todo hasta el final porque las posibilidades están latentes”, dijo Reyes, campeón sub-23 de la Vuelta a Colombia..
