En 1974 mientras el mundo acudía al ascenso de Leonid Brezhnev como presidente del Soviet Supremo, a presenciar la dimisión del presidente argentino Juan Domingo Perón, al inicio del Mundial de fútbol de la antigua Alemania Occidental (que ganaría Alemania Federal), en las canchas de polvo de ladrillo de París un tenista colombiano, Iván Molina, haciendo pareja con una de las más grandes figuras de este deporte, la checa Martina Navratilova, se convertía en campeón del torneo de mixtos del Roland Garros.
43 años han pasado y aunque se ha intentado en varias ocasiones, nunca antes, desde ese momento, otro tenista nacional había estado tan cerca de ganar un torneo de un Grand Slam de tenis como Juan Sebastián Cabal.
En la madrugada de este domingo el vallecaucano intentará igualar a Molina, jugador nacido en Maceo, Antioquia, y hoy de 70 años, quien también consiguió un título ATP en dobles, ese mismo 1974 en Austria -haciendo llave con Jairo Velasco- y cuyo mejor ranquin en individuales fue 40 del mundo.
Y lo hará haciendo dupla con la estadounidense Abigail Spears. Ambos, realizando un trabajo como si se conocieran de mucho tiempo atrás, clasificaron para disputar la final del Abierto de Australia-2017.
Tan frío que no pareciera estar tan cerca de tocar el cielo. Aplomado, aunque con deseos inmensos de escribir la página más importante de su tenis y la de Colombia en cuatro décadas, incluso superando el éxito que ha compartido en los últimos años con su compañero de fórmula Robert Farah, como una de las duplas más importantes del momento en el tenis mundial, Cabal aguarda que ese título sea de su propiedad.
“Estamos contentos, venimos jugando un tenis coordinado y de mucha concentración. No hemos tenido partidos fáciles y los momentos críticos los hemos sacado adelante”, contó ayer, en sus redes sociales y desde Melbourne, este colombiano quien cumplirá 31 años de edad el próximo 25 de abril.
Llevan cuatro juegos. El quinto será el de la disputa del título. Finalista en 2011 del torneo de dobles masculino de Roland Garros, aseguró que es la segunda final de su carrera en torneos de Grand Slam, tras imponerse al dúo conformado por el australiano Chris Guccione y la ucraniana Elina Svitolina, 7-6 (7-1) y 6-2.
La india Sania Mirza y el croata Iván Dodig serán el último obstáculo.
“Esperamos un partido intenso, duro. Conocemos los rivales y sabemos de sus condiciones. Nos enfocaremos en lo nuestro. Tenemos frente a nosotros una final linda, la disfrutaremos y esperamos ganarla”. Ese es el sentimiento de Cabal, el jugador que aspira emular al paisa Molina .
