Tal como lo hizo inicialmente el Independiente Medellín, ayer la mayoría de los elencos del fútbol colombiano decidieron sintonizarse con la realidad del país y, en busca de contener la expansión del covid-19, optaron por cesar sus actividades tanto en los equipos profesionales como en las respectivas categorías y academias.
En Antioquia, a la determinación de suspensión total del DIM, se sumó la de Rionegro Águilas, que determinó parar ayer y hoy, a la espera de determinaciones de fondo por parte de las directivas y cuerpo técnico.
En Bogotá, Millonarios e Independiente Santa Fe también interrumpieron sus labores deportivas y administrativas, en estos dos últimos casos desde el fin de semana los aficionados le estaban solicitando a las instituciones tomar estas medidas, toda vez que esta es la ciudad con más casos confirmados por coronavirus.
Otras instituciones como Once Caldas y Alianza Petrolera, no solo pararon sino que han adelantado campañas para concientizar a la población sobre la importancia de seguir las instrucciones del Ministerio de Salud, acerca del distanciamiento social y las prevenciones de higiene.
“Tenemos un gran compromiso con nosotros, con nuestras familias y con la sociedad”, señaló en un video publicado por el club, el defensor antioqueño Andrés “Pecoso” Correa.
En el Valle del Cauca, América de Cali también se sumó a la ola de suspensiones y además aclaró que la información que circula acerca de su arquero, Eder Chaux, y su supuesto contagio del virus, es falso.
“Fue un comentario malintencionado. Quería darles a conocer que es falso y que me encuentro bien y al lado de mi familia”, expresó el portero, uno de los convocados por Carlos Queiroz en Selección Colombia.
Entre los equipos principales del rentado nacional, como Junior, aunque apoyaron abiertamente la decisión de postergar el fútbol colombiano, aún ayer se mantenían en sesiones de entrenamiento en forma normal.
Cabe anotar que aunque algunos planteles profesionales aún se mantienen en actividad normal ha sido una decisión unánime suspender las prácticas de academias y fuerzas básicas y activando protocolos de protección e higiene en sus sedes y lugares donde residen los juveniles.