Aldo Leao Ramírez está acallando con su nivel, en las prácticas, las críticas de muchos hinchas que se atrevieron a decir que el volante ya no era refuerzo para el club verdolaga, con argumentos como la edad, el que no tenía continuidad en México y en que poco le aportaría al club verdolaga.
Sin embargo, en los entrenamientos no queda duda de que llegó en gran estado de forma y, jugando desde la primera línea de volantes, tiene la misma claridad que cuando lo hacía como mediocampista ofensivo.
Él es consciente que si no demuestra esas condiciones en los partidos oficiales no servirá de nada lo que hace en los entrenamientos. Por eso está ansioso de que comience la competencia oficial.
¿Cómo se siente con tantos halagos de sus compañeros y el cuerpo técnico?
“Imagínese, muy contento y orgulloso por lo que ellos dicen. Eso reafirma mi compromiso y lo contento que estoy de volver. Obviamente vengo a sumar y aprender de un grupo que hizo historia y la quiere seguir haciendo”.
¿A sus 35 años siente que puede aportar más que en sus otras etapas?
“Indudablemente. La edad nunca ha sido una limitante, el fútbol es cuestión de nivel. Me hubiera gustado tener la experiencia que tengo hoy en mis otros pasos por Nacional”.
¿Qué pueden esperar los hinchas del Aldo de hoy?
“Voy a aprovechar esta bonita oportunidad y responder en la cancha con responsabilidad, gratitud y seriedad”.
Reinaldo Rueda y Juan Pablo Ángel lo conocen hace mucho tiempo, ¿eso le ayuda a usted como jugador?
“Haber compartido con ellos en Selección te da una responsabilidad mayor. Te miran desde un punto muy alto y así es como uno debe responder y mostrarlo en cada partido y cada entrenamiento”.
¿Terminará su carrera acá en Nacional?
“Desde hace rato quería volver y no se daba la posibilidad, porque tenía contratos vigentes. Esta es mi casa y ‘¿quién quiere salir de su casa?’. Incluso mucha gente prefiere morir en su casa que en los hospitales. Así que si se da esa posibilidad, de terminar mi carrera acá, estaré feliz de que sea en este club, pero todavía no pienso en eso porque me siento bien, física y futbolísticamente”.
Hay gente que no sabe que usted hace rato cambió su posición en la cancha... ¿le gustó ese cambio?
“En la primera línea de volantes tengo un mejor panorama de la cancha y puedo repartir mejor el juego. En Nacional hay muy buenos jugadores por lo que se facilita esa función. Puedo también sorprender en ataque, porque siempre tuve la facilidad de jugar cerca al arco contrario”.
¿Cual es su mayor motivación en la actualidad?
“Mi esposa y mis tres hijos, ellos son el motor para levantarme temprano todos los días, disfrutar de mi trabajo y dar lo mejor de mí en la cancha”.
En Nacional hay muchos jóvenes para los que usted es un referente, ¿qué les dice?
“Que me miren como un compañero más, que tiene que aportar lo suyo para el bien del equipo, que estoy ahí para aprenderles, porque hoy en día los jóvenes te enseñan mucho y que en mí siempre pueden encontrar un amigo. Llegué a una familia y quiero hacer parte de ella como un integrante más”.
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