Atlético Nacional comienza su camino en los cuadrangulares semifinales de la Liga con un panorama complicado que exige temple, carácter y profundidad de nómina. A las conocidas dificultades futbolísticas que implica medirse con rivales como Millonarios, Santa Fe y Once Caldas, se suman ahora cuatro ausencias claves que representan un verdadero reto para el técnico Javier Gandolfi.
La más mencionada ha sido la de Edwin Cardona, quien todavía no se encuentra al cien por ciento físicamente tras una lesión y, además, debe cumplir una fecha de sanción. Pero esa no será la única baja de peso: a esta situación se suman las salidas de tres jugadores determinantes, convocados por la Selección Colombia para la fecha FIFA de junio: el arquero David Ospina, el lateral Andrés Román y el atacante Marino Hinestroza.
Los tres estarán con la Tricolor al menos hasta la tercera jornada de los cuadrangulares y, dependiendo del calendario y la logística, incluso podrían perderse la cuarta fecha. Esto deja a Nacional sin una columna vertebral que ha sido clave en el repunte mostrado en el tramo final del todos contra todos.
David Ospina venía siendo sinónimo de seguridad y liderazgo bajo los tres palos. Su regreso a Nacional no solo tuvo impacto deportivo, sino también anímico, contagiando experiencia a una defensa joven. Andrés Román, por su parte, aportó solidez por la banda derecha, con despliegue físico, orden táctico y buena salida. Y Marino Hinestroza, con su explosividad y desequilibrio por las bandas, se había consolidado como uno de los revulsivos más importantes del equipo.
Además este sábado se podría confirmar también la baja de Billy Arce, quien podría ser convocado a la Selección de Ecuador.
Ante este panorama, Gandolfi deberá mover piezas y tomar decisiones estratégicas para mantener la competitividad en uno de los grupos más exigentes del campeonato. En principio, los reemplazantes naturales serían Harlen “Chipi Chipi” Castillo en el arco, Joan Castro para el lateral derecho, y Andrés Sarmiento y Kevin Parra en la zona ofensiva.
Castillo tiene experiencia en este tipo de instancias y ya ha demostrado que puede responder bajo presión, aunque será clave que recupere rápidamente ritmo de competencia. Joan Castro, por su parte, deberá asumir la responsabilidad de cubrir un flanco defensivo clave, mientras que Kevin Parra tendrá la difícil misión de aportar desequilibrio en ausencia de Hinestroza, algo que será vital ante defensas cerradas como la de Santa Fe o el orden táctico de Millonarios.
Gandolfi ya ha demostrado capacidad de adaptación en momentos críticos, pero este será uno de sus mayores retos desde que tomó las riendas del club. Nacional enfrentará a Once Caldas, Millonarios y Santa Fe. Tres partidos que podrían definir gran parte de sus aspiraciones a la gran final, y lo hará sin piezas importantes. Sin embargo, si algo ha demostrado este equipo a lo largo de su historia es que sabe sobreponerse a la adversidad.