Cuando en Cementos Argos se enteraron del terremoto en Haití, de inmediato comenzaron las llamadas infructuosas a la planta, ubicada a 25 kilómetros de Puerto Príncipe.
Gabriel Restrepo, gerente de Asuntos Institucionales de la firma, así como varios empleados, trataron de comunicarse con algunos de los 200 empleados que tiene la empresa Cimenterie Nationale (Cina), de la cual Argos controla un 65 por ciento de la propiedad y el 35 por ciento restante el Estado haitiano y otros pequeños accionistas.
"Las comunicaciones han sido muy difíciles, pero por fin se pudo establecer y el reporte que tenemos es que no le ocurrió nada a ninguno de nuestros empleados. Hubo algunos agrietamientos en la planta, pero nada que afecte la operación sustancial de la planta. Se registraron agrietamientos en el muelle de embarque, en el edificio de la administración y el derrumbe del muro de cerramiento", sostuvo.
"La prioridad es responder, en la medida de nuestras posibilidades, a las necesidades de la población y, en particular, a las de nuestros colaboradores", dijo Carlos Raúl Yepes, vicepresidente de Asuntos Corporativos de cementos Argos. Entre personal directo y contratistas, la planta emplea a cerca de 200 personas, catorce de ellas colombianas.
"Y todos ellos están ilesos. Nuestra inquietud es por las familias de los colaboradores de Haití, que viven en Puerto Príncipe", reiteró Restrepo.
El directivo señaló que Argos está tomando acciones inmediatas para atender las necesidades básicas de las personas y familias vinculadas a la actividad de su filial. Igualmente, apoyará las iniciativas que lleven a cabo el Gobierno colombiano y los organismos internacionales para atender los damnificados por esta tragedia.
Cina tiene una capacidad instalada de 600.000 toneladas/año de molienda de cemento y factura alrededor de 53 millones de dólares al año. Con esta planta se atiende el 50 por ciento del mercado de Haití.
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