D arío Chusco Sierra se apoya en tres elementos para ganarse un espacio en los clubes que lo contratan como asistente técnico: trabajo, actitud positiva y sentido de pertenencia.
Ese trío de cualidades lo hicieron indispensable en el andamiaje del Boyacá Chicó (campeón en 2008-1), lo llevaron al Independiente Medellín y lo tienen desde el año pasado en Itagüí Ditaires, que esta tarde visitará al Cúcuta con el afán de enderezar su camino.
En el conjunto dorado se siente muy cómodo, porque le tiene confianza al técnico Hernán Torres debido a "que fuimos compañeros como jugadores en el DIM y tengo mucha empatía con él, prueba de ello es que la pasamos bien en los entrenamientos y cada uno tiene claro sus responsabilidades en la institución".
Apoyado en sus más de dos décadas de fútbol profesional y en la tranquilidad que le dan sus 43 años de edad, este exvolante exquisito con el balón y experto en "motivar a los muchachos con el sentido de pertenencia que se debe tener con los oncenos que uno defienda", se gana un lugar especial.
Dice estar ya preparado para asumir en propiedad un elenco y también es un defensor de "la lealtad para sobresalir", razón por la que trabaja en armonía con el técnico Torres, quien "valora mis observaciones y siempre está atento a las sugerencias que hacemos con el único fin de que las águilas doradas vuelen alto y firmes en la Liga Postobón".
El último revés del Itagüí ante Tolima no le quita el sueño al Chusco para enfrentar hoy al Cúcuta (3:30 p.m.), porque él es un convencido de la estructura táctica, técnica y dirigencial que tiene este plantel para conseguir la clasificación entre los ocho, consolidarse en la Primera A de Colombia y proyectar jugadores" como lo hará hoy con el arquero Arled Cadavid , quien tiene 21 años.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6
