De los tres elementos básicos en el funcionamiento del sistema eléctrico, quizá con el que más contacto tiene el propietario, es con la batería, pues generalmente es a ella a la que se la achacan todas las culpas cuando el carro tiene un fallo de este tipo, aunque no sea la culpable.
Aunque en la actualidad existen muchas baterías libres de mantenimiento, hay componentes de este tipo a los que es necesario hacerles algunas revisiones preventivas. Uno de los principales cuidados es evitar que la batería se seque.
Este elemento está dividido en varias celdas inmersas en una solución química de agua y ácido sulfúrico denominada electrolito, que al reaccionar convierten esta energía química en eléctrica.
Con frecuencia, es necesario revisar el nivel de esta solución líquida en cada celda para verificar si se encuentra en el nivel correcto, de no ser así se puede llenar con agua destilada especial para este componente.
También es importante verificar que los bornes de la batería no estén sulfatados, lo que puede ocurrir bien por el proceso de evaporación de la solución en las celdas, o también porque existe una fuga del líquido.
Para limpiar los bornes, un método simple es la utilización de un poco de bicarbonato de soda diluido en agua y limpiar así cada uno.
Como prevención ante la sulfatación es aconsejable cubrir los bornes con una capa de vaselina o grasa, que evitan que ese sulfato producto de la evaporación del electrolito se adhiera a su superficie.
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