A las 3:00 de la tarde y en la cancha de la Universidad de Fortaleza (Unifor) trabajó ayer la Selección Colombia y montó el esquema que tendría mañana en el primer partido con Brasil por un Mundial, correspondiente a los cuartos de final.
En la mañana el grupo hizo labores de gimnasio en el hotel Luzeiros, a donde llegó el martes a las 8:00 de la noche. El bus con el eslogan "Aquí no viaja un equipo, viaja todo un país", estuvo disponible todo el tiempo en las afueras del lugar de concentración.
Toda la práctica fue a puerta cerrada y se especula que el técnico José Pekerman saldrá con la misma nómina que venció 2-0 a Uruguay por los cuartos de final en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Eso implicaría que Víctor Ibarbo seguiría por fuera, mientras que Jackson Martínez haría pareja arriba con Teófilo Gutiérrez.
Los hinchas se la pasaron merodeando el hotel con banderas, coros y cornetas, pero les fue imposible el contacto con los jugadores. Ni los que están hospedados en el mismo lugar alcanzaron su cometido. La antioqueña Claudia Acosta criticó fuertemente tanto recelo: "la barrera que nos pusieron a los huéspedes para que no viéramos a los muchachos fue demasiada".
Este jueves Pekerman y un futbolista por definir brindarán rueda de prensa en el estadio Castelao.
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