El Gobierno Nacional hizo un nuevo llamado a los alcaldes y gobernadores para que adopten medidas frente al retorno de la temporada invernal en el país y así evitar tragedias como las que se presentaron durante 2010.
En la primera semana del mes de marzo, el invierno ha ocasionado 20 emergencias en los departamentos de Santander, Risaralda, Norte de Santander, Huila, Caldas, Bolívar, Tolima, Atlántico y Valle del Cauca.
Según Hugo Gamba, funcionario del Sistema Nacional para la Prevención y Atención de Desastres "tenemos hasta el momento tres personas fallecidas, tres desparecidas, dos heridos, 296 familias afectadas y 47 viviendas destruidas".
El funcionario advirtió que las autoridades municipales y departamentales deben estar en alerta frente a cualquier emergencia que se pueda presentar. "Necesitamos que los alcaldes estén atentos con los organismos de socorro, esto quiere decir que la Defensa Civil, la Cruz Roja Colombiana y el Sistema Nacional de Bomberos deben estar pendientes de la información que reporte el Ideam, lo mismo que de los datos que pueda suministrar el Gobierno a través del Sistema Nacional de Atención y Desastres frente a posibles deslizamientos, avalanchas o crecientes súbitas" dijo.
Casos de emergencia
El desbordamiento de un río en la población de California, en el departamento de Santander , dejó tres muertos y cuatro desaparecidos. Un día antes, otra persona había muerto en esa misma región al colapsar un puente.
De acuerdo con el reporte del Ideam, en la cuenca alta y media del río Magdalena también se han presentado inundaciones, especialmente en las estaciones hidrológicas ubicadas en los municipios de Neiva (Huila), Purificación, Girardot, Honda (Tolima); Puerto Berrío (Antioquia); Puerto Salgar (Cundinamarca) y Barrancabermeja (Santander).
Así mismo, algunos habitantes del municipio de Soacha, Cundinamarca, están afectados por las lluvias que provocaron un deslizamiento de tierra.
Seis casas quedaron destruidas luego del deslizamiento de la montaña que separa los barrios El Arroyo y Villa Esperanza en ese municipio. "Se perdió todo y no tenemos para donde coger, realmente son 13 años los que se perdieron. Ahora para dónde vamos, estamos sin casa y sin reubicación", manifestó Pedro Vásquez, habitante del sector.
Por su parte, en el municipio de Chitigá, Norte de Santander, la vía que comunica a esa población con el interior del país permanece bloqueada por un desprendimiento de tierra.
Los vehículos de carga son los más afectados y algunos conductores llevan varios días en la zona intentando desbloquear la vía. "Aquí nadie ha venido a solucionarnos nada, llevamos más de tres días en esta situación y nadie nos colabora, solamente nosotros con nuestros propios medios hemos tratado de solucionar algo", denunció uno de los conductores.
Incomunicados también se encuentran Ginebra y Guacarí, en el Valle del Cauca, donde se estima que cerca de 5.000 campesinos resultaron afectados por más de 10 deslizamientos que bloquearon la carretera.
Tres corregimientos de Buenaventura, en el Valle del Cauca, fueron declarados en alerta máxima por el desbordamiento del río Pepitas.
El Ideam agregó que "durante marzo es probable que se presenten algunas emergencias asociadas con deslizamientos de tierra y con niveles altos en algunas zonas ribereñas de las cuencas hidrográficas, especialmente del centro y norte del país".
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