Pocos actores realmente exitosos pueden contar la inusual historia del danés, ganador del premio a mejor actor en Cannes e intérprete del macabro Hannibal Lecter en su versión televisiva, Mads Mikkelsen.
El arte dramático no fue una necesidad para su vocación artística sino hasta los 30 años, cuando redirigió una carrera en el negocio del espectáculo que hasta entonces había estado enfocada en la danza.
Casino Royale, El Rey Arturo, Furia de Titanes y Los Tres Mosqueteros son algunas de las cintas en las que Hollywood se ha aprovechado de su perfil enigmático.
"Él es misterioso", aseguraba la actriz francesa Anna Mouglais para el momento del lanzamiento de Coco Chanel & Igor Stravinsky, cinta en la que el dúo de actores franco-danés recrea el romance que mantuvieron la diseñadora de modas y el músico ruso. "No llegas a saber qué hay detrás de sus ojos", añadía.
Es de la mano del también danés Nicolas Winding Refn (Drive), no obstante, que la revelación Mikkelsen llega al Olimpo del séptimo arte.
En 1996, se estrena Pusher, la primera vez que los hijos de Copenhague sumaron esfuerzos. Lo hicieron de nuevo en Bleeder, la secuela de Pusher lanzada en 2004 y, más recientemente, con Valhalla Rising.
"Tenemos un acuerdo verbal", comentó Winding Refn en una entrevista concedida al New York Times. "Si se lo pido, él tiene que interpretar el papel principal".
El año pasado, Mikkelsen protagonizó The Hunt (La cacería, en cartelera en Medellín ), nominada a la Palma de Oro y ganadora de tres premios, entre ellos mejor actor.
De Cannes y su papel como profesor en medio de un difícil proceso de separación, Mads Mikkelsen pasó a ocupar el lugar de un gigante, interpretando un papel que, como pocos, ha quedado en el inconsciente colectivo.
El principal reto que se le plantó a la hora de encarnar al doctor Lecter en la serie Hannibal, transmitida actualmente por el canal AXN, fue el de reinterpretar el célebre rol de Anthony Hopkins en El Silencio de los inocentes.
En la versión para televisión, afirma Mikkelsen, "se pueden ver escenas diferentes a las que tuvo Anthony. Así que sí, el logró la perfección, no estamos tratando de copiar eso".
Para muchos de los seguidores de la serie gore, la nueva estrella de Hollywood añade el misticismo apropiado, el acento justo para interpretar a un lituano de gustos refinados y antropófagos. En otras palabras, la única versión de Hannibal capaz de llenar los zapatos de Hopkins.
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