La necesidad de saber qué dicen las películas, documentales, series y otros trabajos audiovisuales que se producen en el mundo, ha sido un estímulo para que surjan nuevas comunidades de traductores en Internet.
Apasionados por los idiomas, quienes hacen parte de estos colectivos trabajan sin remuneración económica. Uno de los objetivos: generar subtítulos de descarga gratuita.
David Orrego, estudiante del doctorado en traducción y estudios culturales de la Universitat Rovira i Virgili en Tarragona, España, es uno de ellos.
Experto en la producción de comunidades de subtitulación no profesional, afirma, que estos colectivos surgieron en los años 80 en E.U., por la necesidad de comprender las series de animé japonesas. Agrega, que se sostienen bajo la premisa de compartir conocimiento y aprender de los demás.
"Es un trabajo voluntario que realizan miles de personas en el mundo con la intención de hacer fluir el conocimiento".
Incluye, que "lo interesante de que sea en internet, es que cualquier persona al rededor del mundo puede traducir, lo que amplía el rango idiomático de productos audiovisuales".
Quienes deseen pertenecer a una de estas comunidades, deben registrarse en uno de los sitios web especializados en esta labor. Inmediatamente les enviarán un paquete de subtítulos de un producto audiovisual determinado.
Todos están divididos por tramos de tiempo, de forma que una película pueda ser traducida por cinco o seis personas, brindando así más velocidad en cuanto a la espera de los usuarios.
Estas comunidades permanecen abiertas al conocimiento, la única exigencia es estar dispuesto a compartir.
Pico y Placa Medellín
viernes
no
no