Desde que estaba en el colegio se visualizaba en traje formal, de saco y corbata, dirigiendo su propia empresa.
Para ello sacrificó parte del tiempo que muchos adolescentes dedican para divertirse y la dedicó al estudio lo que le valió a Henry Alberto Agudelo ser, en 2008, el mejor bachiller de la Institución Educativa María Auxiliadora de Sabaneta.
Aunque nunca le ha faltado nada con sus padres no se imaginaba estudiando en la Universidad Eafit, por lo costosa, sus compañeros pagan un promedio de cinco millones de pesos por semestre. Siempre pensaba en una universidad pública o la de Medellín que es un poco más asequible.
Pero el destino le tenía deparada esa sorpresa. El Municipio de Sabaneta inició un programa para becar a los mejores tres estudiantes de cada una de las ocho instituciones educativas públicas que hay en su territorio para continuar sus estudios universitarios en cualquiera institución de pregrado que lograrán pasar o que quisieran estudiar, pública o privada.
Como siempre quiso estudiar algo relacionado con administración, a través de internet, empezó a indagar cuál era la mejor opción y se encontró conque los mejores del ramo en el país eran egresados de Eafit.
No lo dudó y realizó todas las vueltas en la Alcaldía de Sabaneta y luego en la Universidad Eafit en donde ya cursa tercer semestre de Administración de Negocios.
Y sí que ha aprovechado la oportunidad, pues esta universidad, como Henry mismo lo dice, brinda mucho apoyo a los estudiantes becados. Lleva cuatro niveles de inglés sin tener que pagar un peso.
"Hay algunos que no tienen conque pagar sus pasajes y la universidad les da un subsidio. También el almuerzo a quienes lo necesitan", expresa con agradecimiento Henry.
Van dos promociones
El programa ya cobija dos promociones, es decir, que 48 estudiantes de bajos recursos ya están en la universidad gracias al esfuerzo financiero de la Alcaldía.
Según el alcalde Guillermo Montoya, entre ellos hay unos 12 de extracción muy humilde que jamás hubieran tenido la oportunidad de estudiar en una universidad privada, lo que hace que sea un programa de un alto contenido social.
"El programa no define que sea en una universidad pública o privada, es la que ellos quieran o a la que pasen y la Alcaldía les paga la totalidad de la matrícula", precisa Montoya.
La única condición que se les pone es mantener un promedio superior a 3,5 y la cual Henry no solo cumple sino que supera pues sus calificaciones, que debe presentar al finalizar cada semestre, presentan un promedio de 4,1.
"No es el mejor, pero trató siempre de superarlo, por eso hasta hoy no he perdido un solo examen", anota Henry. El sueño de Henry de tener su propia empresa está cada vez más cerca. Ya piensa en cómo corresponderle al municipio por la ayuda que le está brindando.
"El día que ya esté planteado y tenga una base económica buena la idea es montar la empresa en Sabaneta para darle empleo a la gente de allí", afirma Henry.
Pico y Placa Medellín
viernes
3 y 4
3 y 4
