Imprudencia o afán de protagonismo. Solo el presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, Luis Bedoya, sabe por qué dio las declaraciones en las que anunció, en plenas semifinales, que en el torneo profesional colombiano se investiga un supuesto caso de corrupción por parte de un árbitro.
El dirigente, quien se encuentra en Nassau (Bahamas) en el congreso de la Fifa, donde lo acompañan los presidentes de la Dimayor y la Difútbol, Ramón Jesurún y Álvaro González, respectivamente, ayer no respondió su celular.
Jesurún sí lo hizo, pero advirtió que ante sus ocupaciones no podía atender las inquietudes y nos remitió donde el presidente de la Comisión Arbitral, Fulton Vargas, quien a su vez aseguró que le corresponde a la Comisión Disciplinaria de la Federación llevar a cabo las investigaciones, aunque fue generoso en las apreciaciones.
En la Fiscalía hay una investigación y aunque varios medios de comunicación han señalado que la supuesta irregularidad se presentó en el juego Once Caldas-Chicó, en que se pitó un penalti inexistente a favor del local, Vargas insistió que el partido no se relevó y que todo obedece a especulaciones de la prensa.
Con sus declaraciones, Bedoya alborotó el avispero cuando pudo esperar a que las indagaciones arrojaran un resultado concreto y definitivo. Eso sí, sacó en limpio a los dirigentes de los equipos al señalar que el caso tiene que ver, aparentemente, con apuestas, y aseguró que ya estaban advertidos.
Jesurún le comunicó el domingo a El País de Cali que no puede certificar si las pruebas son contundentes, pero aceptó que "hay muchas" en este nuevo hecho que pone en entredicho al balompié nacional.
Caldas cree que no fue allí
Jairo Quintero, presidente del Once Caldas, opinó que si la Federación tiene pruebas de cualquier irregularidad, "que las presente para que se investigue; yo no tengo ninguna base de que eso esté sucediendo".
Agregó que no cree que el supuesto ilícito se cometió en el partido Caldas-Chicó, "porque si eso fuese así, en el gol que hizo Chicó hubo una falta que le hicieron a un jugador nuestro, entonces lo hubieran anulado. Para mí, la acción del penalti fue muy rápida y cualquier árbitro se puede equivocar. Eso hay que tomarlo con pinzas. Con nosotros, en muchas ocasiones, se han equivocado los jueces". Quintero sentenció que el día que vea que no hay transparencia en el fútbol colombiano lo denunciará, "pero con pruebas en la mano".
Fulton Vargas manifestó que en la reunión de mañana, en la Comisión Arbitral, tratarán el tema a fondo porque lo que sabe es por comentarios que le hizo Bedoya. En su concepto, no hubo ligereza en el presidente de la Federación "porque nosotros tenemos que estar abiertos a investigar cualquier irregularidad en el fútbol de manera inmediata. No podemos guardar ni ocultarle nada a la opinión pública. Hay que ser prudentes, pero diligentes y creo que ese ha sido el caso".
Frente a si estos comentarios pueden molestar a los árbitros, Vargas señaló que nunca se generalizó y sólo se habló de un partido que se mantiene en reserva. "Esto puede resultar molesto para los jueces, pero es necesario", puntualizó.
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