La secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, criticó este domingo al gobierno de Israel por continuar con la construcción de asentamientos, señalando que "tiene un efecto negativo" en las negociaciones de paz del Medio Oriente.
La semana pasada, Israel anunció que se propone construir 1.300 nuevos apartamentos en el este de Jerusalén, que los palestinos desean convertir en su capital, en caso de crear una nación independiente.
Rice formuló sus comentarios tras reunirse con el presidente palestino Mahmud Abbas, en su último intento por lograr que israelíes y palestinos alcancen un acuerdo de paz para fines de 2008.
La máxima representante diplomática estadounidense indicó que su gobierno continúa comprometido con la firma del tratado del paz para la fecha anunciada, pero indicó que los planes de Israel de construir millares de viviendas en la Cisjordania y en el este de Jerusalén están afectando la atmósfera de negociaciones.
Rice dijo que "es importante que exista una atmósfera de confianza" y que los anuncios de Israel "están teniendo un efecto negativo" en las conversaciones.
La secretaria de Estado dijo que planteará el tema de los asentamientos en las próximas horas, cuando dialogue con el primer ministro de Israel Ehud Olmert. La oficina del líder israelí se negó a formular comentarios.
Dirigentes palestinos han dicho en varias ocasiones que la construcción de asentamientos por parte de los israelíes está socavando el respaldo popular a las negociaciones de paz. "Consideramos esos asentamientos el mayor obstáculo al proceso político", señaló Abbas.
Los palestinos reclaman toda la Cisjordania como parte de un futuro estado independiente, y a Jerusalén oriental como su capital. Israel capturó ambas zonas en la guerra de 1967. En la actualidad, unos 250.000 israelíes viven en asentamientos en la Cisjordania, y otros 180.000 israelíes tienen residencia en Jerusalén oriental.