Con un equipo de producción de 180 personas y 23 toneladas de equipo técnico, esta noche a las 8 comenzará la emisión del Desafío 2014, el realiti de Caracol que esta vez se desarrollará en Marruecos, al norte de África.
Es la segunda ocasión consecutiva que el programa se efectúa en dicho continente. En 2013 fue en Senegal.
"Las mil y una noches son un reflejo de la realidad como lo es el Desafío. Aquí se trata de incorporar toda la cultura al contenido del programa. Lo que queremos mostrar es a Marruecos y más allá", explicó Sebastián Martino, el productor general.
Para la producción, uno de los principales objetivos con la realización de este producto en Marruecos es que el televidente, vea, piense y sienta la cultura árabe. Conozca sus costumbres, su arquitectura, su vestuario y su idioma, con esta experiencia la idea es que este Desafío sea diferente a los anteriores.
Margarita Rosa de Francisco vuelve a conducir el programa siendo catalogada por sus productores como el ícono del Desafío, un ejemplo de profesionalismo, una persona que tiene las riendas del programa, y una presentadora que se vive el realiti.
Las mil y una noches
Como es habitual, tres lugares con diferentes condiciones alojarán a los competidores, pero esta vez los tres sitios no serán playas, pues la que sería playa baja, ahora es La Nada; el estrato medio del Desafío será La Aldea Bereber, y las comodidades estarán en El Ryad.
Los 21 desafiantes, divididos en tres grupos: Celebridades, Retadores y Sobrevivientes, tendrán que sobrevivir a las duras pruebas, condiciones climáticas y costumbres árabes, pues el lugar intermedio después de cada prueba territorial será compartir con la tribu nativa Bereber.
Según Mario Valencia, director del producto, "el reto para los participantes no es sólo el juego como tal de poder tener una habilidad física, sino un desafío cultural al que se enfrentan. Es por esto que el concepto de realiti ha cambiado más por un intercambio cultural, porque tienen más actividades que los acercan al sitio donde estamos".
Al final, de los 21 concursantes, solo uno se quedará con el botín de $600 millones.
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