¿Lo que nada nos cuesta volvámoslo fiesta? Para nada. Es común ver a habitantes de Medellín cuidar mucho su ciudad, no arrojar basuras en la calle, tratar sus enseres públicos con mucho cuidado y de comportarse con espíritu ciudadano. Pero, cuando salen a otros lados se comportan como unos desadaptados sociales. Son amos de las pilas de basura, viven como un tornado que arrasa con todo, y ni qué decir con sus actitudes en las fiestas y reuniones. Está bien "allá no los conoce nadie", pero no estar en la ciudad natal no los hace unos irrespetuosos. Los visitantes deben dar hasta más ejemplo de civismo que los mismos locales.
Pico y Placa Medellín
viernes
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