Margarita Álvarez no lo podía creer. Hace escasos cuatro meses, su hijo, Alejandro González, y su adversario de ocasión, el español David Ferrer, departían en uno de los salones del complejo tenístico Flushing Meadows, en Nueva York, cuando ambos coincidieron en el US Open.
¡No…... Esto es increíble, expresó la madre del joven tenista antioqueño tras conocer el rival al que se medirá Alejo en primera ronda del que será su debut en un cuadro principal de uno de los cuatro grandes del tenis mundial: el Abierto de Australia.
"Quedamos sorprendidos. Es su primer torneo de Grand Slam y mire, en suerte, quién le toca". Y sí, según el jugador promovido por el Grupo Argos, Prince y Adidas, "nada menos que la culebrita de Ferrer, pero ¡qué carajo…, para eso estamos. Y si nos toca con uno grande de una vez, pues que venga", señaló desde Melbourne.
La carta de presentación de Ferrer: español, 32 años, tercero del ranquin mundial, 11 veces jugador del Open australiano (dos veces semifinalista, actual subcampeón), un título Masters 1000, siete títulos en torneos ATP 500 y doce en ATP 250, entre otras cosas, además de haberse mantenido en el top 20 ATP durante las últimas nueve temporadas, terminando cuatro de ellas entre los top 5. ¡Culebra de verdad…
"Esperemos que Alejandro haga un buen papel, será duro pero no tiene nada que perder, sí mucho que aprender y ganar", agrega Margarita, quien al lado de Tatiana, la hermana del tenista y de Alberto, el padre, coinciden en que el paisa es un gladiador y no será menos que el adversario.
"Que juegue a divertirse y a hacer bien las cosas. Estamos contentos por el salto y porque lo hace ante uno de los mejores. Es bueno arrancar así. Se lo merece. Es muy trabajador, disciplinado", concluye Alberto.
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