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El director de la revista Semana, Alejandro Santos, habló este jueves con Blu Radio y afirmó que la publicación tiene pruebas de las actividades irregulares dentro de la operación Andromeda e insiste que sí se chuzaron a los negociadores de paz del Gobierno en La Habana, Cuba.
"En esa fachada de legalidad se hacían trabajos ilegales, tenemos todos las pruebas, las fuentes, el acervo probatorio y testimonial de lo que ocurrió", indicó Santos.
El director de la revista además confirmó que se espiaba ilegalmente "no solo a los negociadores sino a otros sectores" y agregó que el Gobierno y los militares tratan de bajar la temperatura cuestionando la credibilidad del medio, como pasó con las chuzadas del DAS.
Así mismo, indicó que falta mucho por revelar y aseguró que no divulgarán las fuentes para no ponerlas en peligro. "Lo único que logran las investigaciones son las amenazas al tocar intereses muy profundos", afirmó Santos.
Por último, el director de la revista agregó que lanzaron el material periodístico por la página web porque tuvieron conocimiento que otro medio estaba también tras la noticia.
Apenas 24 horas después de acusar a "fuerzas oscuras" de estar detrás de las escuchas del Ejército a los negociadores del Gobierno en La Habana, el presidente, Juan Manuel Santos, afirmó que esas operaciones de inteligencia son "totalmente lícitas".
"Las fachadas de inteligencia, como la que se allanó (registró), son totalmente lícitas. Son operaciones de inteligencia que están contempladas dentro de la ley de inteligencia, y eso no tiene nada de irregular", indicó el mandatario en un acto en Bogotá.
Estas declaraciones distan mucho de las realizadas, pocas horas después de destaparse el escándalo, cuando Santos responsabilizó directamente a "fuerzas oscuras que están tratando de sabotear procesos, como el proceso de paz".
El mandatario también ordenó abrir una "investigación a fondo" que derivó en el "relevo" esa misma noche del jefe de Inteligencia del Ejército, el general Mauricio Ricardo Zúñiga, y del director de la Central de Inteligencia Técnica del Ejército (Citec), el general Óscar Zuluaga.
La revista Semana reveló el pasado martes que un grupo de militares, exmilitares y expertos en informática espiaron desde una central clandestina de Bogotá a líderes de la izquierda y a los negociadores del Gobierno en el proceso de paz.
Entre los investigados gubernamentales están el jefe negociador, el exvicepresidente Humberto de la Calle; el alto comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo; o el director de la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR), Alejandro Eder.