La condena de 10 años y 10 meses proferida en primera instancia el pasado 19 de febrero por el Juez 15 Penal Municipal de Medellín a ocho jóvenes miembros de la barra Xanguinarios del Deportivo Independiente Medellín, que asesinaron a Juan Esteban Giraldo, hincha del Atlético Nacional, la endureció el Tribunal Superior de Medellín, por una condena severa y ejemplarizante de 33 años y cuatro meses.
La decisión la tomó este Tribunal luego de que la defensa hubiera apelado por considerar la primera, como una condena injusta.
El Tribunal Superior de Medellín no sólo ratificó la culpabilidad de los ocho agresores, sino que además quitó cualquier tipo de beneficio de excarcelación o de prisión domiciliaria y, por el contrario, aumentó la condena en 23 años y dos meses, con el argumento de sevicia y agravantes al homicidio, por haber sido "cometido contra una persona en total indefensión", según concluye el fallo.
Los hechos que llevaron a esta medida ocurrieron el 8 de febrero de 2008 a las 11:00 de la noche en el barrio Belén Las Mercedes, occidente de Medellín, cuando el grupo de hinchas, entre 18 y 24 años, apuñaló a Juan Esteban Giraldo, de 18 años.
La agresión a Giraldo se produjo luego de varios altercados entre las barras de Giraldo, Los Bandidos, y la de sus agresores, Los Xanguinarios, hinchas de los dos equipos locales de fútbol y quienes mutuamente habían saboteado los grafitis realizados por los contrarios.
Con gritos, lágrimas y vociferando contra los juristas, respondieron familiares y amigos de los acusados al escuchar el pasado miércoles el fallo del Tribunal Superior de Medellín, el cual tiene un carácter de última instancia y que sólo podría ser apelado ante la Sala de Casación de la Corte Suprema de Justicia.
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