Francisco Sanín es arquitecto de la UPB y su mayor sueño era conocer Europa.
Por eso, una semana después de graduarse emprendió el viaje con su esposa y con un tiquete solo de ida, pues la idea era dejar que el destino decidiera por ellos.
Sin conocer a nadie buscaba en los directorios de las ciudades los números de arquitectos famosos que admiraba. Los llamaba y les pedía que lo recibieran para que le hablaran de cómo estaba la arquitectura en cada lugar.
Gracias a uno de ellos llegó a ser profesor y durante estos años ha enseñado en Londres, Florencia, Bélgica, Corea y Estados Unidos, entre otros.
Hoy en día se la pasa viajando porque tiene proyectos en varios países, pero el preferido es en Syracuse, Nueva York, donde trata de mostrarle el mundo entero a sus alumnos.
Por ahora no piensa volver a Colombia, pues teme perder muchas oportunidades que solo encontró afuera.
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