"Es una pieza de estudio, pero es tan bonita que puede tocarse como una obra principal", dice Sophie cuando le preguntan por lo que acaba de interpretar en el piano de la clase del profesor Keith.
Es una forma de presentarse ante sus compañeros del salón de música, pues Sophie ha llegado a aquel colegio de un pueblo cercano a New York como estudiante de intercambio. Lo curioso es que su profesor, cabeza de la familia Reynolds, que también aloja a la joven inglesa, sólo hasta el momento en que les quita respiración a todos con su talento, se da cuenta de la belleza física de aquella joven.
Tal vez no lo había notado porque Keith es un tipo satisfecho. Sin embargo, la llegada de Sophie le recordará que convive con personas que no tienen su sensibilidad y miran la vida de otra manera.
"Pasión inocente" (¡qué horrible traducción del título original: "Breathe in"…) es una película inteligente, que sabe tomar un tema recurrente como el del adulterio o la relación entre un hombre mayor y una jovencita, y mirarlo sin caer en el cliché de la pasión sexual desatada. Doremus va construyendo una película cuya tensión va in crescendo casi hasta el final, que saca provecho a la relación entre las imágenes y la música (los sonidos del chelo y del piano representan la vida interior de los protagonistas) y que, sin ser perfecta, logra emocionar y nos permite respirar en un cartelera invadida de películas grandilocuentes.
Pico y Placa Medellín
viernes
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