Que sí, que no existe la máquina del tiempo. Sólo que el Ballet Folklórico de Antioquia, en cambio, tiene el baile y la música.
Y para celebrar estos primeros veinte años, desde ese agosto de 1991, el espectáculo tenía que ser con eso que ellos saben hacer, o que han hecho precisamente durante todo este tiempo: bailar.
A la propuesta, incluso, no le cabía otro nombre, como explica Camilo Maldonado, director artístico, "a cada espectáculo le pensemos mucho cómo se va a llamar". Había que ser directos: Ballet Folklórico de Antioquia - 20 años.
El show, que se vio anoche y que se verá hoy en el teatro Metropolitano, agrupa las coreografías más emotivas de nuestra historia.
"Reúne -añade Camilo - el presente, el pasado y el futuro".
De ahí que el montaje sea hasta un reencuentro entre los bailarines que están ahora y los que estuvieron algún día. "Queríamos que volvieran a sentir eso que experimentaron", explica el director artístico.
Porque van a bailar, precisamente, eso que alguna vez bailaron.
Para seguir soñando
En el montaje, que muestra a un ballet tradicional y a uno que también mira las nuevas tendencias, trabajaron durante estos primeros seis meses. La emoción, entre tanto, será de dos horas. Ellos allá, emocionados por bailar y que les salga perfecto, y usted acá, emocionado por el recuerdo y por eso que los caracteriza: el movimiento preciso y el puro sentimiento.
Será entonces una experiencia en la que el tiempo va y viene. Y entonces volverá esa época de Albeiro Roldán, cuando lo fundó. Y vendrá esa época que imagina Zuleima Asprilla, su actual gerente, y de seguro todos los que hacen parte de él: "Perdurar en el tiempo. Nos imaginamos como la Ópera de París, que tiene como 450 años".
Y se imaginan bailando, como en esta noche, en la que los 20 años, son sólo el abrebocas del show.
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